El pleno del Ayuntamiento de Tarragona ha desbloqueado este lunes el presupuesto municipal del 2021. Este trámite se ha podido formalizar tras haber rechazado las alegaciones a las cuentas presentadas por los representantes de los trabajadores del consistorio.
El equipo de Gobierno local, formado por ERC y ECP, con apoyo de JxTgn y la CUP, han desestimado las propuestas del personal. Lo hizo tras tomar en consideración un informe de intervención que afirmaba que "las reclamaciones no se ajustaban a las previsiones legales", según ha apuntado el consejero de Servicios Centrales, Jordi Fortuny.
Abierto al dialogo
Las reivindicaciones de los empleados se centraban en incrementos en las partidas destinadas a personal, que consideraban insuficientes. Durante la celebración del pleno los trabajadores se han concentrado en la puerta del Ayuntamiento. De esta forma, han mostrado su desacuerdo con la decisión y reclamar soluciones a sus peticiones.
Por su parte, Pau Ricomà, alcalde de la capital provincial, ha afirmado que "está dispuesto a hablar con los trabajadores" y ha recordado que hay demandas pendientes de resolver desde hace años. El pleno también ha servido para que Lorena de la Fuente tomara posesión como nueva concejal de Cs en sustitución de Rubén Viñuales, que se se ha unido al grupo municipal socialista.