Esquerra Republicana teme el llamado efecto Illa. Las encuestas pronostican un buen resultado del PSC, y los republicanos han sacado a pasear a la extrema derecha para marcar distancias. En un mitin este sábado, su candidato, Pere Aragonès, ha acusado a los socialistas de "querer hacer un Valls con Vox", es decir, expulsarlos de un hipotético futuro Govern al pactar con la formación de Santiago Abascal, tal y como el exministro francés evitó que Ernest Maragall se hiciese con la alcaldía de Barcelona.
Aragonès trata de neutralizar una eventual victoria socialista y acusa a Salvador Illa de planear un pacto con la extrema derecha para expulsar a los independentistas de la Generalitat. “Progresista, independentista, republicano, antifascista, antiracista, y de izquierdas”, ha bramado el republicano para definirse ante las juventudes de su partido.
"Operación 155"
Según el cabeza de lista de ERC, los socialistas traman una "operación 155" para expulsar a los soberanistas del Ejecutivo catalán, mientras que Ciudadanos acusa al PSC de todo lo contrario: planear un tripartit con republicanos y comuns. Ambas formaciones, contra Illa. Las proyecciones electorales han dejado huella en los discursos de campaña, que se centran en cargar contra el exministro de Sanidad y, de cola, el procés.
En el caso de Aragonès, vinculando una eventual victoria del PSC con el ascenso de Vox en Cataluña. "Tenéis en vuestras manos parar a la extrema derecha"; "No nos hará callar nunca la ultraderecha, ni los racistas, ni los monárquicos". Recuerdan las palabras del candidato republicano a aquel viejo eslogan de campaña que rezaba, "si tú no vas, ellos vuelven", casualmente, acuñado por los socialistas catalanes.