Reuniones de hasta 10 personas y toque de queda a la una de la madrugada en Nochevieja, pero la portavoz del Govern, Mertixell Budó, ha asegurado este martes que ninguna otra comunidad autónoma tiene “restricciones tan drásticas como Cataluña”. ¿Ninguna? La Comunitat Valenciana limitó a seis los participantes en encuentros y fijó a medianoche el encierro nocturno en fechas señaladas como el 31 de diciembre. Además, solo se podrá salir y entrar de dicho territorio para volver a la vivienda habitual: trabajadores o estudiantes que tienen la residencia en esta autonomía.

En cambio, los catalanes pueden salir de su comunidad para los reencuentros navideños, y desplazarse por todo el territorio para acudir a segundas residencias, alojamientos turísticos o visitar a familiares. Aún hay más. El pasado 18 diciembre, la Comunidad de Madrid también redujo de 10 a seis todas las reuniones; también las festivas. 

Más restricciones en otros territorios

Baleares, Cantabria, Extremadura y Navarra también han endurecido sus restricciones para contener el Covid-19 durante las últimas horas, algo que la Generalitat ha descartado, pese al globo sonda de su consejero de Interior este domingo, cuando Miquel Sàmper anunció la posibilidad de adelantar el toque de queda en Nochevieja, aunque finalmente este se mantiene para la una de la madrugada.

Sí lleva razón Budó en un extremo, el de las medidas que afectan a la restauración. Mientras que en Cataluña bares y restaurantes no pueden prestar servicio a partir de las tres de la tarde --solo preparar pedidos para recoger o enviar--, en Mallorca, desde el 29 de diciembre y hasta el 11 de enero se impondrá el cierre de la restauración a las seis de la tarde.

Dureza con la restauración

En Extremadura la hostelería deberá cerrar entre las seis y las ocho de la tarde el 31 de diciembre y 1, 2, 5 y 6 de enero; mientras que en algunas zonas de Galicia --las marcadas como de alto riesgo de contagio-- deben cerrar sus bares a las cinco de la tarde y su aforo en terraza es del 50%.

El patinazo de Budó --que ha reiterado la afirmación hasta en dos ocasiones, tras el Consell Executiu-- trata de justificar el paso atrás de la Generalitat, tras dejar caer que endurecería las restricciones antes de acabar el año. “Las medidas vigentes son mucho más restrictivas que las de cualquier territorio del Estado español”, ha insistido a preguntas de los periodistas.

Diez personas en Nochevieja

Descarta así el Govern implementar nuevas restricciones, pese a que en las últimas 24 horas el territorio ha registrado 3.010 nuevos positivos, 58 fallecidos por coronavirus y una treintena de nuevos ingresos en la uci. "Hay unas medidas drásticas que se aplican desde hace días y lo que se debe hacer es cumplirlas", ha zanjado Budó.

Una postura que han criticado no solo expertos sanitarios, sino incluso el expresidente Quim Torra, quien escenificó sus discrepancias con el Ejecutivo catalán a través de Twitter. "Con la actual presión asistencial, son necesarias medidas de restricción social. Ahora no podemos jugárnosla. Especialmente en Fin de Año", censuró la pasada jornada.