La Generalitat recurrirá el auto del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que ordena renovar los conciertos con las escuelas que separan a los alumnos por sexo y que habían sido denegados en mayo pasado por el ejecutivo autonómico; decisión que fue impugnada por una decena de centros vinculados al Opus Dei a finales de octubre.
El Departamento de Educación ha anunciado que mantiene la voluntad de no renovar estos conciertos y "más ahora cuando hay un consenso mayoritario en el Estado demostrado la semana pasada con la aprobación en el Congreso" de la denominada ley Celaá.
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Los 10 centros que habían solicitado las medidas cautelares que el TSJC ha aceptado son Canigó, Bell-lloc del Pla, Les Alzines, Pineda, Xaloc, Institució Lleida, Esc. Fam. Agr. Campjoliu, Institució Tarragona, La Vall, La Farga y Viaró.
Esta renovación de los conciertos con las escuelas que separan por sexo tiene una duración de seis años (hasta el curso 2026-27) --la Generalitat los había prorrogado este curso por última vez--, unas subvenciones que ascienden a unos 30 millones de euros anuales.
Según el tribunal, estos colegios que segregan a los alumnos por sexo tienen el mismo derecho a recibir financiación pública que el resto de centros escolares catalanes.