El secretario socialista catalán, Miquel Iceta, piensa que “no es la mejor opción” de que el Rey acudiera al acto de jueces en Barcelona. No obstante ha afirmado que Felipe VI “puede ir Cataluña” siempre que lo desee pero que debe “decir a qué y cuándo” por lo que su presencia en dicha convocatoria no era adecuada en los días de la sentencia de inhabilitación de Quim Torra.

En una entrevista a Televisión Española, ha señalado que  estos actos "solo los puede decir el Gobierno", pero que se le ocurre que "quizás alguien pensó que ir a un acto de un componente judicial muy importante la semana que quizás se hacía pública la sentencia que puede afectar al presidente de la Generalitat no era la mejor opción". El socialista ha incidido en que el Rey “debe estar y ha de venir” al territorio catalán.

Defensa del Rey

En la misma entrevista ha incidido en que Felipe VI debe visitar Cataluña aun “sabiendo que hay una parte de la opinión pública catalana que ha roto amarras con el Rey y con el Estado". Iceta también ha revelado que "hay que recuperar afectos" y que esto pasa por una "presencia inteligente" del jefe del Estado.

Por último, Miquel Iceta ha dejado clara su postura de defensa al Rey. “Felipe VI es un símbolo, la pieza, la cúspide, el jefe del Estado y, por lo tanto, tenemos que trabajar para que sea cada vez más respetado, más querido y que su figura sea integradora", ha puntualizado.

Lesmes mostrará el malestar

Por otra parte, horas más tarde de las palabras del líder socialista, se conocía que el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Carlos Lesmes, formalizará este viernes el malestar del organismo por la no asistencia del Rey en el acto de entrega de despachos a los nuevos jueces que se celebrará en Barcelona.

La Comisión Permanente ha acordado esta protesta, donde tras discutir sobre la posible redacción de un comunicado institucional sobre este asunto se ha dispuesto finalmente que sea este viernes, sea el presidente del TS quien muestre el malestar por la falta de Felipe VI en el encuentro.