El Govern sufre un revolcón en el Parlament por la mala gestión del coronavirus
El motín de los alcaldes de Lleida, destapado por ‘Crónica Global’, centró el debate. JxCat y ERC no pudieron impedir que se aprobara una moción socialista para aumentar los recursos del ámbito local
10 julio, 2020 00:00La rebelión de los alcaldes independentistas de Lleida contra el Govern protagonizó el debate celebrado ayer en el Parlament, donde los socios del Ejecutivo presidido por Quim Torra no pudieron impedir la aprobación de una moción de PSC-Units a favor de dotar de recursos al mundo local.
Tal como publicó ayer Crónica Global, el pasado lunes tuvo lugar una reunión muy tensa entre la Generalitat y los primeros ediles del Segrià, muy críticos por la falta de coordinación, de recursos y de liderazgo durante el rebrote del Covid-19 en esa comarca. Especialmente duros fueron los alcaldes de Serós, Aitona y Alcarràs.
Críticas a Budó
La diputada del PSC Marta Moreta, muy dura con la consejera de Presidencia, Meritxell Budó --responsable de las relacions con el mundo local-- defendió una moción para dotar de más recursos a las corporaciones locales. “Quisiera comentar unas declaraciones que seguro que le sonarán: Tuve la sensación de que me llegaba más información de Italia, que de nuestro país. Esto lo decía públicamente el alcalde de Igualada, Marc Castells, de PDeCAT, cuando se produjo el confinamiento de la Conca de Òdena".
"Más tarde --añadió--, Lluís Soler, presidente de la Asociación Catalana de Municipios y dirigente también del PDeCAT, pedía públicamente más recursos para el mundo local. Y se mostraba muy crítico con la gestión del Gobierno. Y este fin de semana, el alcalde de Lleida, de ERC, explicaba que le hubiera gustado tener más tiempo para preparar el confinamiento. Está claro que esto no es coordinarse con las corporaciones locales. Miren, a la consejera Budó le sobra arrogancia y le falta moderación”.
Comuns: "Quejas de alcaldes del mismo partido"
Por parte de Catalunya en Comú-Podem, Susana Segovia también arremetió contra Budó, pues “por mucho que diga la consejera, con toda la grandiosidad de sus palabras, de que ha habido muchísima coordinación con el mundo local, que se ha trabajado codo con codo, mano a mano, no es cierto. Sólo hay que hablar con los alcaldes y alcaldesas para saber que no es cierto. Y, de hecho, lo estamos viendo ahora mismo en la gestión, también, de la crisis en el Segrià. Donde alcaldes que incluso son de los partidos que están en el Govern se quejan de la falta de respuesta y de coordinación de la Generalitat".
Según Segovia, "Budó no ha coordinado. No ha asumido el papel de liderazgo como responsable de la coordinación con los entes locales. Tener reuniones, de vez en cuando, con los representantes de la Federación Catalana de Municipios y de la Asociación Catalana de Municipios, esto no es coordinarse con los ayuntamientos”.
PP: "Las grandes olvidadas"
Daniel Serrano, diputado del PP, apoyó la moción socialista “porque pone el foco en una de las administraciones damnificadas y olvidadas en las crisis, el mundo local. Lo fue en la crisis económica y financiera del 2008 y lo ha vuelto a ser en la crisis sanitaria del Covid-19. Y lo ha sido y lo es, porque los ayuntamientos acaban asumiendo los costes de los servicios que corresponderían a otras administraciones, especialmente a la Generalitat”.
La diputada de ERC Adriana Delgado coincidió en la necesidad de apoyar a los consistorios, pero “es curioso cómo por parte del PSC es tan fácil exigir recursos casi sin límite, en todos los ámbitos de la Generalitat, y por otra parte, cuando se trata de reclamar al Estado, esta exigencia desaparece. Los ayuntamientos también estamos hartos de tener que ejecutar decisiones del Gobierno del Estado publicadas el domingo en el BOE”.
Anna Erra, de Junts per Catalunya, aseguró que en su partido “somos exigentes, y seremos exigentes con nuestro Govern, pidiendo que nos ayude y que esté al lado, porque estar al lado de los municipios es también estar al lado de los ciudadanos de este país. Ahora bien, también sería el momento que España acelerara la enmienda de JxCat a la Comisión de la Reconstrucción del Congreso de los Diputados”.
Cs: "Ha asumido competencias del Govern"
Por parte de Ciudadanos, Dimas Gragera criticó los impagos de la Generalitat, “obligando a los ayuntamientos a acudir a mercados financieros mientras ustedes detenían los recursos, no asumían competencias, y las asumían los consistorios, con los gastos y el perjuicio en otras políticas que llevaban a cabo. Y es una situación que tampoco se ha revertido con la pandemia. Hemos visto el abandono que ha habido en el caso de residencias, han comentado también el tema de las becas comedor, de otras ayudas sociales... No se ha revertido esta situación, tampoco en este momento”.
Carles Riera, diputado de la CUP, también avaló la iniciativa socialista, porque “nuestros municipios están en la primera línea, están en la trinchera cada día, lo han sido siempre y ahora más, de la respuesta a las necesidades sociales más urgentes y más importantes de la gente de nuestro país, dando respuesta cada día a las demandas de primera línea de nuestra gente”.
Y también en esta crisis “han sufrido y están sufriendo un abandono absolutamente injusto e inaceptable por parte del conjunto de las instituciones de gobierno. Y miren, efectivamente, nuestros ayuntamientos ya asumen habitualmente responsabilidades y competencias que no les son propias, como por ejemplo la de las guarderías”.
La moción
Finalmente, la moción desglosada en 31 puntos fue aprobada íntegramente, incluido el punto que JxCat y ERC rechazaron y que propone un Fondo Catalán para la Reconstrucción social y económica que dote a los ayuntamientos, como mínimo, de 300 millones de euros a los ayuntamientos. Los independentistas también votaron en contra de revertir los recortes en el mundo local y la grave morosidad.
Los dos socios del Govern intentaron tumbar, también sin éxito, la propuesta de pactar con el Estado el uso íntegro de los remanentes de tesorería generados por cada ayuntamiento, y flexibilizar su impacto en la estabilidad presupuestaria. El Govern se niega, asimismo, a anular su decisión de reasignar los fondos FEDER, destinados en un principio a proyectos locales, a gasto sanitario.