Una tertuliana de TV3 llama a "disputarle el territorio" a España

Los llamamientos a la "confrontación" de los mandatarios nacionalistas de Cataluña, y el amplio eco que éstos reciben en sus medios de comunicación afines, han encontrado un peligroso caldo de cultivo entre los numerosos opinadores que copan las tertulias de buena parte de la prensa pública y subvencionada por la Generalitat. Es el caso de Pilar Carracelas, tertuliana de TV3 y RAC-1, que en sus redes sociales se dedica a realizar incendiarios llamamientos al enfrentamiento para lograr su anhelado objetivo: la independencia.

Carracelas le ha cogido el gusto a grabarse en vídeo dando discursos en Twitter, en los cuales acusa de pusilánimes a los dirigentes del procés por no haber llevado hasta las últimas consecuencias, según ella, la DUI y su choque con España, al coste que fuera.

"¿Cómo se hace la independencia? Ni ganando elecciones autonómicas, ni pactando con España, ni confrontando al Estado desde una app que sólo puede hacer encuestas de opinión. (SPOILER) No he descubierto la rueda. Todas las independencias se hacen igual: disputándole el territorio al Estado", sostiene la tertuliana de varios medios de comunicación catalanes.

"Caos económico" y muertos

En el vídeo, Carracelas justifica tales afirmaciones aduciendo, entre otras cuestiones, que creando un "conflicto gordo y sostenido en el tiempo", y de consecuencias imprevisibles, el Estado se vería forzado a conceder la independencia a Cataluña.

Entre sus sugerencias a los dirigentes independentistas para conseguir su objetivo figuran el llamamiento a la ciudadanía para que "ocupe infraestructuras clave", aún reconociendo que ello acarreará "costes" tan graves como el "caos económico", los "choques de legitimidades" la "represión policial" y la posibilidad de que ésta pueda "generar muertos". Como, a su modo de ver, podía haberlos habido durante el referéndum ilegal del 1-O.

Como es habitual en los dirigentes y opinadores ultranacionalistas, eso sí, Carracelas obvia en su vídeo el pequeño detalle de que los partidos independentistas no han llegado siquiera a la mitad de los votos en unas elecciones.