El presidente de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) en el Parlament, Sergi Sabrià, critica la decisión del presidente de la Generalitat, Quim Torra, de convocar elecciones en Cataluña. "Nosotros no necesitábamos las elecciones", asegura. "ERC no las quería porque el país no las necesitaba, parece que JxCat sí", critica al recordor que no contó con el consenso de los republicanos.

Sabrià ha lanzado serios reproches contra las iniciativas tomadas por el líder catalán por cómo ha dirigido la Generalitat, entre ellos su actitud de desobediencia constante al Estado. "No sé si dejar una pancarta y sacarla cinco días después mejoró algo", indica. En una entrevista en Radio 4 ha afirmado que los objetivos de los secesionistas deben ser si las medidas que toman son buenas para la ciudadanía y si acercan a Cataluña a la independencia, y cree que esta acción del presidente no fue la más acertada.

Desobediencia

Pese a que el portavoz de Esquerra reconoce que la desobediencia es una vía que no rechazan si ha de llevar a la independencia de Cataluña, admite ahora que no siempre es el camino acertado. "Hemos de desobedecer si nos lleva a ganar. Nos ha de llevar a la victoria y no a derrotas", subraya en alusión a la actitud de Torra ante la advertencia de la Junta Electoral Central de retirar la pancarta a favor de la excarcelación de los políticos presos en periodo de elecciones, que acabó con su inhabilitación como diputado.

Algunas propuestas que se han lanzado a favor de la independencia "se han tomado mal", afirma Sabrià. Contrapone la desobediencia del presidente a la decisión de Roger Torrent de acatar las órdenes de la JEC, hecho que evidenció aún más la mala relación entre los socios de Gobierno. "Fue una medida acertada", considera.

ANC vs Omnium

La falta de sintonía entre las distintas facciones del independentismo no sólo afecta a las formaciones políticas. El giro de ERC hacia un cierto pragmatismo dentro del independentismo lo ha llevado a distanciarse de ciertas entidades secesionistas. El republicano reconoce que se siente "más cerca de Òmnium que de la ANC", de la que dice que va "más lenta" a la hora de adaptarse a las situaciones. "La estrategia de la ANC nos hace sentir un poco más lejos de ellos", insiste.

Pese a no renunciar a la independencia, su apuesta ahora es la mesa de diálogo que acordaron con el PSOE, donde insiste en que defenderán "el derecho a la autodeterminación y la amnistía" de los presos políticos, pero dispuestos a escuchar las propuestas del Ejecutivo de Pedro Sánchez. "Queremos saber si el Estado tiene una propuesta para Cataluña o no", afirma.

Mediador

Las negociaciones con el Gobierno son otro de los puntos de fricción entre ERC y JxCat. Mientras los posconvergentes apuestan por la necesidad de que haya un "relator", los republicanos son defensores de que exista un mediador, "sería bueno", pero sin que eso condicione el diálogo. "Hay una serie de oportunidades que no se pueden desaprovechar", advierte en relación a la postura de sus socios en la Generalitat.

Sabrià reconoce que "alguna vez me ha parecido una excusa para no dialogar". Espera que Junts per Catalunya no lo use como pretexto, "pero a veces ha sonado" como tal, e incluso prevé que "seguro que no lo harán". "Tampoco estaban de acuerdo con la mesa y aceptaron", ha recordado.

Elecciones

Los republicanos tratan de mantener una postura de acercamiento con los socialistas, pero con matices. Mientras aceptan la voluntad de diálogo del PSOE, reprochan al PSC, y a su líder, Miquel Iceta, que apoyaran el 155 y no visiten a Junqueras en prisión. Con este pretexto tratan de alejar el fantasma de un nuevo tripartito tras las elecciones catalanas.

Los partidos están ya en campaña y empiezan a lanzar sus mensajes, como hicieron JxCat el pasado domingo donde se lanzaron duros mensajes contra Esquerra. "Hicieron un miting, totalmente", indica Sabrià, quien asegura que los posconvergentes "se equivocan atacando a los que están a su lado". El republicano defiende que la estrategia es lícita, "igual nos arrancan tres votos", pero ellos prefieren "sumar votos de socialistas desencantados", reconoce. Lo único que pide es "que Elsa Artadi no nos ataque tanto".

Sobre la fecha de las elecciones, Sabrià niega conocer cuándo serán y apunta que corresponde al presidente de la Generalitat fijarla. Los republicanos entendieron el día del anuncio de la convocatoria que el presidente, tras aprobar los presupuestos, determinaría que serían el 17 de mayo, "me parece que ahora no está tan claro y se podría dilatar un poco más", ironiza. El portavoz de Esquerra subraya que "igual que [Torra] no consultó la convocatoria electoral, no está obligado a compartir con nosotros la fecha".