La crisis entre Junts per Catalunya y ERC, que vaticina elecciones en Cataluña, ha dado sus primeros frutos. Los diputados neoconvergentes, en solidaridad con Quim Torra al que se ha retirado su acta de diputado, han decidido que no ejercerán su voto y eso ha impedido que los presupuestos del Parlament prosperen en el pleno que se celebra hoy.
Esta postura, ha anunciado el presidente del grupo, Albert Batet, se hará extensiva a los Presupuestos de la Generalitat para 2020 que pactaron el vicepresidente del Govern, Pere Aragonès (ERC), y En Comú Podem.
Ningún voto a favor
El presupuesto del Parlament ha sido rechazado con ningún voto a favor, 16 votos en contra de los comuns, PP y la CUP, y 82 abstenciones de Ciudadanos, PSC-Units y ERC, en una votación sin la participación de Junts. Sí han salido adelante los presupuestos del Consejo de Garantías Estatutarias y de la Sindicatura de Cuentas para este años, pero no los del Síndic de Greuges, cuyo titular, Rafael Ribó, es investigado por aceptar la invitación de un viaje para ver un partido de la Champions.
El presidente de la Cámara autonómica, Roger Torrent, ha ejecutado la orden de la Junta Electoral, avalada por el Tribunal Supremo, de suspender el voto del presidente catalán para evitar que las instituciones catalanas queden bloqueadas a resultas de una "desobediencia simbólica" que "no conduce a nada". Sin embargo, la decisión de Torrent ha desencadenado un enfrentamiento entre los socios del Govern.