El aniversario del 1-O se 'desinfla' en sus primeras horas
La presencia policial en puntos conflictivos como los cuarteles de la Guardia Civil y las estaciones de tren han reducido el posible impacto de las manifestaciones convocadas por los CDR
1 octubre, 2019 09:03La mañana del segundo aniversario del referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 se ha desarrollado sin grandes manifestaciones o incidencias. Debido, en parte, a la fuerte presencia policial tanto en las concentraciones convocadas como en zonas que sufrieron grandes afectaciones el año pasado.
Además de las antorchas encendidas durante la madrugada en varias agujas de Montserrat, a primera hora de la mañana unas 200 personas han seguido las directrices de los CDR y se han reunido en la plaza de Cataluña de Girona. Sobre las 6.30 horas han comenzado una marcha hasta el cuartel de la Guardia Civil de la ciudad detrás, sin disturbios destacados y tras varias pancartas con referencias al 1-O y a los independentistas en prisión provisional.
"El combate continúa"
Los independentistas han llegado a la sede de la Benemérita tras una pancarta que rezaba "Dos años después... el combate continúa". Se han encontrado allí a un cordón policial que les ha impedido el paso y los portavoces de los grupúsculos de los CDR han decidido leer un manifiesto en el que han pedido a las fuerzas independentistas "dar un decidido paso adelante". Han aprovechado el momento para lanzar críticas a aquellos grupos secesionistas que se lanzan "acusaciones" entre ellos. Una lanza que podría estar dirigida a los partidos independentistas, JxCat y ERC, cuyo distanciamiento se hace más evidente con el paso de los días.
"Basta de acusaciones. Basta de señalarnos. Sabemos construir juntas. Lo hemos demostrado muchas veces y lo continuaremos demostrando. Cada uno desde su papel", han destacado los CDR, que se han autodenominado como "los que harán temblar al enemigo", en referencia al Estado. Contra él han dirigido palabras como "bestia malherida" que usó una "violencia desatada" el día de la celebración del referéndum ilegal y contra el que "hay que continuar alzadas". "Lo volveremos a hacer las veces que haga falta", han comentado.
Evitar la confrontación
Los Mossos d'Esquadra han llamado a la calma a los presentes en la manifestación por megafonía, a pesar de que la tranquilidad ha sido la tónica general de la actitud de los secesionistas. El único momento de tensión se ha vivido ante el cuartel de la Guardia Civil gerundense, donde varios de los congregados han lanzado pintura y huevos al cordón policial, sin mayor trascendencia. Poco después, uno de los presuntos autores de estos hechos ha sido interceptado por la policía catalana, que le ha pedido su identificación.
Tras esta parada, se han dirigido a la subdelegación del Gobierno de Girona que, al igual que la sede del Instituto Armando, contaba con un cordón policial y vallas de protección.
Vigilancia en las estaciones ferroviarias
Además del seguimiento de la concentración en Girona, los agentes han aumentado su presencia en la estación de tren de alta velocidad de la ciudad, una de las instalaciones más afectadas por los disturbios de los secesionistas en el primer aniversario del 1-O, el año pasado. Sobre las 9.15 horas de la mañana, han optado por cerrar la entrada principal de las instalaciones y hacer entrar a los usuarios por una pequeña puerta lateral, según ha informado Cadena Ser.
Los Mossos han pedido, además, el cierre de accesos a la parada del metro de Sants Estació de Barcelona por seguridad. La afectación ha implicado el cierre del enlace de Metro con Renfe dentro de la estación barcelonesa, por lo que éste debía hacerse a través de la entrada situada en la plaza de Països Catalans de la L3. Una hora después, el enlace ha sido reabierto.