Deportividad. Dionís Guiteras, diputado al que ERC había propuesto como presidente de la Diputación de Barcelona, ha admitido que Núria Marín no era su opción, pero “el juego democrático es el que es, ha habido una mayoría simple. Le extendemos la mano para trabajar en esta institución”. Así ha hablado tras la designación de la alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, como presidenta del ente supramunicipal, gracias a un acuerdo de Junts per Catalunya.
“La política, ha dicho, tiene dos vertientes, la gestión de los recursos de los ciudadanos, pero también es ideología, son derechos, libertades, luchas, sueños que se deben hacer realidad. Con 24 diputados se podía haber dado cobertura a una ciudadanía que tiene anhelos de futuro. No ha sido ha sido. No aceptamos los cordones sanitarios. El pacto de Junts y PSC es justo y democrático. Cada uno hace lo que debe hacer. Por sus hechos les reconoceréis”.
Por parte del PP, Xavier García Albiol, ha advertido de que “no hay una mayoría de diputados independentistas, pero nos preocupa que haya ido de la mano de Puigdemont”. Albiol desea que en la nueva legislatura se de apoyo a los ayuntamientos y no se haga propaganda.
Salvador Tovar, diputado de Ciudadanos, ha criticado el abuso de la subvención directa a medios de comunicación afín y las irregularidades en la concesión de ayudas durante el mandato que ahora acaba.
“Pero lo más grave es la utilización partidista de la Diputación por parte del independentismo pero, pese a ellos, usted ha decidido pactar con el independentismo más beligerante. Es un pacto sospechoso y poco transparente”, ha dicho Tovar.
"No es un pacto secreto"
La diputada del PSC, Pilar Díaz, ha recordado que su partido fue el más votado. No solo representamos a 16 diputados, sino a más de 600.000 votos. Pero estoy convencida de que la presidenta lo será de todos”. Ha negado que el pacto entre Junts y PSC sea secreto, sino que se ha hecho "con luz y taquígrafos, que está al servicio de las personas".
Laura Pérez, por parte de En Comú Guanyem, ha pedido que la Diputación no sea el escenario de confrontación del procés y se dedique a atender las urgencias sociales y repensar el modelo económico, aunque ha expresado su deseo de dar una respuesta al encarcelamiento de los políticos secesionistas. “Esta Diputación ha estado en los últimos cuatro años al servicio de la Generalitat, en contra de las necesidades de los ayuntamientos”, ha dicho, tras destacar la emergencia climática como prioridad.
Joan Carles Garcia i Cañizares, de Junts per Catalunya, ha apelado a la diversidad territorial para justificar el pacto con PSC. “Son necesarios grandes dosis de realismo, seny. Lo sabemos muy bien los alcaldes de esta demarcación. La diversidad de ideas y proyectos enriquecen la institución