Santiago Fisas en el Parlamento Europeo

Santiago Fisas en el Parlamento Europeo

Política

Santiago Fisas: "PP y Cs deben hacer con Pedro Sánchez lo que ha hecho Valls con Colau"

El eurodiputado en funciones del Partido Popular advierte a la formación naranja de que corre el riesgo de que "le pase lo mismo" que a su partido en Cataluña: "Se están equivocando mucho"

21 junio, 2019 00:00

Santiago Fisas (Barcelona, 1949) deja la política. En los últimos diez años ha sido eurodiputado del PP en el Parlamento Europeo, donde coincidió y entabló amistad con Oriol Junqueras y Raül Romeva. Dice que "hay que saber retirarse a tiempo" y, por esta razón, junto al giro del PP en manos de Pablo Casado, ha decidido dar el paso. 

--Pregunta. ¿Cómo ha visto en estos diez años el ascenso del euroescepticismo?

--Respuesta. Ha ido a peor con los años. Hay partidos de extrema derecha y de extrema izquierda y ambos votan unidos en contra de temas europeos. Estuve en la comisión de comercio internacional y vi al partido de Marine Le Pen y a Podemos y votaban igual. Por razones diferentes, eso sí, pero votaban lo mismo. En estas últimas elecciones se ve más euroescepticismo, pero quizás menos de lo que temíamos.

--Usted coincidió como europarlamentario con Oriol Junqueras y Raül Romeva.

--Sí y tengo una excelente relación con los dos. Cuando empecé en el Parlamento Europeo, en mi primera legislatura, Romeva no era independentista. Después, se fue convirtiendo en independentista… Recuerdo que decía que iba a dejar la política después de pasar por el Parlamento Europeo porque decía que, si no, con el paso de los años, era mucho más difícil reciclarse. En aquel momento no quería ser político de profesión, pero todo el mundo puede cambiar de opinión. Es legítimo.  

Con Junqueras íbamos juntos de Barcelona a Bélgica. Y después, mínimo una vez al mes, nos venía a buscar un coche para llevarnos a Estrasburgo, que era más de una hora de viaje. Lo he conocido mucho, podría escribir un libro con todas las conversaciones que hemos tenido… Siempre se ha abierto conmigo y siempre tuvimos una relación francamente buena.

--¿Junqueras le ha pedido que vaya a visitarlo a la cárcel?

--No podía contactar conmigo, pero sí que transmitió a otras personas que le haría ilusión que fuera.

--¿Irá a verlo?

--De momento no he ido, pero cuando deje la política es posible que sí.

--También el expresidente de la CEOE Juan Rosell fue una vez ya no tenía cargo institucional.

--Siendo un cargo electo no puedo poner en dificultades a mi partido, el PP. Pero una vez ya no esté en política, a título personal... Hay la cuestión política y la cuestión humana. Por un tema de humanidad estoy más que dispuesto a ir a ver a Romeva, a Junqueras o a Forn, con quien coincidí en el Ayuntamiento de Barcelona. Tengo aprecio por estas tres personas. Soy consciente de mi posición política y de que se puede malinterpretar. Se debe diferenciar entre un acto personal y un acto político.

--¿Cómo se ve desde Europa la prisión provisional de los políticos nacionalistas?

--Para mí la prisión preventiva tiene que ser algo muy excepcional, y personalmente no creo que hubiera un riesgo de fuga en sus casos. Algunos se fueron y volvieron, por ejemplo. Me parece que hubiera sido más justo estar en una posición, tanto para su defensa como para todo, sin la prisión preventiva. Quizás en Europa tampoco se entiende del todo esta situación. Ahora bien, son los jueces los que deciden. Lo que he dicho es un deseo personal, pero respeto totalmente lo que dicta la justicia.

--¿Cree que el señor Puigdemont podrá acceder al Parlamento Europeo el día de su constitución el 2 de julio?

--Creo que no podrá entrar, ya que tampoco ha ido a recoger su acreditación [en España].

--¿Cómo ve que Junqueras pudiera ir al Congreso a buscar su acta de diputado y no pueda ir a Bruselas a recoger la de eurodiputado?

--Son casos diferentes. Una cosa es dentro de España, donde el juez no ve riesgo de fuga y está tutelado. Hay una cierta lógica. Sería contradictorio desde el punto de vista de los jueces pedir la prisión preventiva y posteriormente dejarle salir del país. Otra cosa es que yo personalmente piense que la prisión preventiva no era necesaria.

--Dice que mantenía una relación fluida con Junqueras, Romeva y Forn. ¿Les llegó a avisar de que sus actos podían tener consecuencias penales?

--Creo que pensaban que esto no podía suceder. Es verdad que el entonces delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, les habló claramente de los riesgos de ir a la cárcel o que habría consecuencias si continuaban con su plan rupturista… Ellos ya no eran eurodiputados cuando todo esto sucedió, y aunque tenía su contacto móvil, no me comuniqué con ellos.

--¿Cómo se ve la figura de Puigdemont en Europa?

--De momento, no opinan porque no es eurodiputado, pero han visto que hay partidos de extrema derecha que están a favor de Puigdemont. Los de extrema derecha flamenca, Vlaams Belang, por ejemplo, apoyan a Puigdemont y son los mismos que colaboraron con los nazis en Bélgica.

--Vox estará en el mismo grupo que Vlaams Belang en el Europarlamento.

--Son cosas muy extrañas. A mí Vox no me gusta nada. Creo que Vox no es exactamente lo mismo que el Frente Nacional. Por ejemplo, Le Pen quiere salir de Europa, pero Vox no lo quiere. Hay diferencias, pero no estoy nada de acuerdo con Vox en el tema societario, de la mujer u otros. Lo que pasa es que hay un debate en toda Europa de si aislarlos o integrarlos. Porque si los echas también tienen más fácil la demagogia.

--¿El independentismo ganó la batalla a nivel europeo el 1-O?

--En la opinión pública, sí. Me acordaré siempre de que uno de los momentos duros fue desde el 1-O hasta finales de mes. En todos los medios a los que asistía había un discurso a la defensiva. Nos costó en aquel momento una mala impresión y tuvimos que hacer un esfuerzo muy importante de comunicación y explicar que en España no hay presos políticos.

--¿Qué le parece el giro del PP con Casado? ¿Era más partidario de Rajoy?

--Era más partidario de Rajoy. El PP es un partido muy grande, con gente muy conservadora y gente muy centrista. Luego no es tan fácil volver al centro…

--¿Cree que a Cs le puede pasar lo mismo que al PP en Cataluña?

--Totalmente. Ciudadanos se está equivocando mucho. No puede ser la muleta del PP. Es un error importantísimo. Tiene que ser lo que era, poder pactar hacia un lado y el otro. Porque, si no, la gente acaba votando al original y no a la copia, y eso es votar al PP. En las elecciones han subido en toda España, pero en Cataluña han quedado estancados. No han aprovechado la situación.

--¿Qué opinión le merece Manuel Valls?

--A mí Colau no me gusta nada, pero aún me gusta menos Maragall, que es independentista. La decisión de Valls fue muy acertada. La política es buscar lo menos malo y ser parte de la solución. El giro de Cs hacia la derecha no es lo que buscaba Valls. Y ahora los problemas los tendrán en Europa.

--¿Sánchez ha capitalizado la relación con Macron y los liberales europeos?

--Sí. Y creo que tanto Cs como el PP se deberían abstener en la elección de Pedro Sánchez. Hacer lo que ha hecho Valls con Colau. Y luego hacer una oposición firme y correcta.

--¿Qué sentencia espera por parte del Supremo en el caso de los políticos presos?

--Creo que la rebelión es muy difícil que exista… Hubo violencia, pero no en grado tan importante. Pero yo tampoco soy juez y respeto la decisión de los tribunales.