El Ayuntamiento de Barcelona, que gobierna Ada Colau (BComú), ha concluido que Jordi William Carnes "gastó indebidamente" 15.400 euros al frente de Barcelona Turisme, un 82% menos de lo que inicialmente filtró el ejecutivo local a los medios para justificar el cese del directivo al frente del consorcio de promoción turística.
Según ha avanzado El País, Carnes se dejó poco más de 15.400 euros en hoteles, regalos y ágapes de representación institucional, una cifra que, esgrimida por el ayuntamiento, provocó la salida del directivo. No obstante y en defensa de William Carnes cabe recordar dos elementos. Por un lado, el directivo ya ha devuelto la cifra. Por el otro, la cantidad es muy inferior, hasta un 82%, respecto a la que inicialmente avanzó el gobierno municipal como dispendio sin justificar del exjefe de Barcelona Turisme.
Menos de lo que apuntaba el ayuntamiento
En efecto, en diciembre de 2018 el equipo de gobierno de Colau filtró a NacióDigital un informe preliminar de la Dirección de Control de Gestión del ayuntamiento. El documento, elaborado por la auditora Ernst&Young, indicaba que William Carnes habría gastado hasta 89.600 euros al frente del ente público-privado --lo forman el consistorio y la Cámara de Comercio-- sin aportar facturas. El propio consorcio y el directivo presentaron alegaciones y documentación accesoria contra esa cifra. Finalmente, Control de Gestión ha rebajado más de cinco veces el dinero inicialmente apuntado.
Carnes, que en la actualidad pilota el Centro Tecnológico Leitat, de ayuda a la innovación de las empresas, ha devuelto el dinero para cerrar el asunto. Considera que no cometió ninguna ilegalidad y ha señalado que se reserva el derecho a emprender acciones legales para reparar su imagen si el gobierno municipal de Barcelona persiste en una investigación que se ha deshinchado.
Relevo opaco
Cualquiera que fueren los acontecimientos futuros, el cierre en falso del caso William Carnes ya ha perjudicado al directivo. Éste se vio obligado a dimitir en febrero de 2018 tras cuatro años al frente del ente de promoción público-privada. En su lugar entró el burócrata Joan Torrella, quien lleva desde 1983 en la administración local. El proceso de selección de Torrella nunca se explicó, pese a que en un momento se indicó que el consorcio ficharía a una empresa de headhunters para encontrar al relevo de Carnes.
Lo explicitó el propio concejal de Empleo, Empresa y Turisme, Agustí Colom, quien subrayó tras la dimisión del directivo que el sucesor se designaría mediante un procedimiento "abierto, transparente y de pública concurrencia". Finalmente, no ha sido así.