El Tribunal de Cuentas remite a Fiscalía la propaganda exterior del 'procés'

¿Hubo financiación pública para la promoción internacional 'procés' independentista? Eso es lo que piensa el fiscal jefe del Tribunal de Cuentas, Miguel Ángel Torres, que ha remitido a la Fiscalía General del Estado un informe con posibles responsabilidades penales y contables de los dirigentes de la Generalitat. Los ejecutivos catalanes comprendidos entre los años 2011 y 2017 –que corresponden a las presidencias de Artur Mas (CiU) y Carles Puigdemont (JxSí)– están en el foco de esta sospecha. 

La conclusión del informe, que ha publicado el El País, se votará en el pleno del organismo este jueves y se sospecha que el presunto dinero malversado haya llegado a los 7,3 millones de euros. El Tribunal de Cuentas ha terminado un amplio trabajo, a petición de la comisión mixta del Congreso y el Senado, de más de 500 páginas. Este trabajo recoge los resultados ante la sospecha de que el gobierno de Cataluña haya impulsado con dinero la promoción de la secesión catalana en el ámbito internacional. 

Supervisión del Estado

El documento, según el diario antes citado, detalla decenas de partidas dedicadas de manera irregular a viajes, actividades, contactos, contratos, ayudas, subvenciones, aportaciones, pagos y asesoramientos del presidente catalán. Al president se incluyen los consellers y el Diplocat. El informe recoge algunas recomendaciones para los gobiernos autonómicos y central. Al segundo le pide que coordine y controle los planes exteriores de las comunidades autónomas. El organismo insiste en la necesidad de adaptar la acción exterior catalana con los "planes y principios que rigen la acción exterior española". Asimismo, aboga porque se eviten “ambigüedades, reiteraciones y contradicciones” de las delegaciones y les pide la "debida lealtad".

El Fiscal, explica El País, detalla 166 actividades de los responsables de ese departamento de Acción Exterior entre 2013 y 2015 para fomentar y publicitar el reconocimiento del procés. Por ejemplo, la intensificación de las intervenciones en conferencias y debates sobre el tema, así como los acompañamientos al presidente y los consejeros a este tipo de actos. Además, destaca la cantidad de viajes oficiales con esa finalidad y reuniones con parlamentarios de otros estados.