La comparación efectuada por Carles Puigdemont entre Israel y Cataluña ha indignado a sectores de la comunidad judía afincada en nuestro país, pues le recuerdan su alianza con partidos políticos antisemitas como la CUP, que está detrás del boicot al partido entre las selecciones de waterpolo de España e Israel cancelado en Molins de Rei (Barcelona) en noviembre de 2018.
En una entrevista en el canal de televisión israelí KAN, el expresidente de la Generalitat, huido de la justicia en Bélgica aseguró que “en Cataluña hemos visto a Israel un proyecto nacional y cultural muy parecido. Una nación perseguida, que ha tenido que proteger su lengua, que ha tenido que luchar contra grandes imperios que han intentado neutralizarla, y que tiene que luchar muy duramente para hacerse un espacio en el mundo, para hacerse respetar". “¿Qué tiene que ver la falacia separatista de Puigdemont con Israel?”, se pregunta el portavoz de la asociación Acción y Comunicación sobre Oriente Medio (ACOM), Ángel Mas. Este lobby pro israelí asegura que los ciudadanos judíos que viven en España “creemos en la convivencia a través de nuestros valores constitucionales”.
En declaraciones a Crónica Global, Ángel Mas asegura que “no solo la situación de Israel poco tiene que ver con el secesionismo golpista de Cataluña sino que no legitima el separatismo catalán. Israel nació como realización de un deseo milenario, la reconstitución de una nación histórica, la reacción a una persecución ancestral, y como resultado de un reconocimiento internacional y una serie de guerras por la supervivencia. ¿Qué tiene que ver la falacia separatista de Puigdemont con Israel?”.
Afirma que “el nacionalismo separatista catalán , tanto PDeCat como ERC, ha apoyado desde las localidades que gobierna mociones de discriminación antisemita y de boicot a Israel auspiciadas por el movimiento BDS (Boicot, Desinversiones y Sanciones contra Israel)”. Ese movimiento –añade-- busca la desaparición de estado judío y las iniciativas que propugnaron esos partidos promovían la estigmatización y la exclusión de los judíos y de cualquiera que apoya a Israel en esas localidades catalanes”.
El antisemitismo de la CUP
Ese “nacionalismo separatista” se apoya “en grupos violentamente antisemitas como las CUP para mantenerse en el poder. Las CUP glorifican el terrorismo contra objetivos judíos e israelíes. El mejor ejemplo reciente de esta alianza antisemita separatista es el boicot sufrido por la selección femenina de waterpolo israelí en Molins de Rei (Barcelona), ayuntamiento gobernado por el partido de Puigdemont”. Se refiereal partido entre las selecciones de waterpolo de España e Israel que se canceló en su emplazamiento original y tuvo que jugarse antes de lo previsto y prácticamente a escondidas.
Selección femenina de Waterpolo de Israel, víctima del boicot de la CUP en contra de un lobby / TWITTER
“Al mes de entrar al poder el alcalde separatista de la localidad, se aprobó una moción de boicot antisemita, puesta luego en práctica ante las exigencias de la CUP, sus socios de gobierno”, explica Ángel Mas. ACOM ha presentado una demanda judicial a este respecto. “Que diga que son amigos de Israel mientras presentarán a uno de los más conocidos antisemitas que se hayan sentado en el Parlamento Europeo, Raül Romeva, como número uno de su lista unitaria de JxSi es un sarcasmo y dice todo de su proximidad a Israel”.
El abogado de Puigdemont
También recuerda que el abogado de Puigdemont es Gonzalo Boye, “uno de los lideres del movimiento BDS, que promovió el procesamiento de las autoridades israelíes ante la Audiencia Nacional y que tiene proximidad con grupos violentos palestinos Los ciudadanos judíos que viven en España creemos en la convivencia a través de nuestros valores constitucionales”.
Los judíos españoles, asevera, reconocemos que “la democracia constitucional española nos restituyó derechos y libertades individuales y colectivos tras siglos de exclusión, que nuestro estado de derecho, sus jueces y su policía, esos que vituperan Puigdemont y sus socios, son los que nos protegen de los intentos de agresión y las mociones antisemitas de elementos del separatismo catalán”, asegura el portavoz de ACOM, quien concluye que “los partidos constitucionalistas españoles son los que han mantenido consistentemente la defensa de las minorías judías españolas y la lucha contra su discriminación por el BDS. Es una obligación halájica (de la ley judía) cumplir escrupulosamente con el marco legal reconocido de nuestro país”.