Una estrella de TV3, sobre los jueces del Supremo: "Es como hablar de Hegel a jabalís"

Los insultos e improperios en clave nacionalista de Toni Albà no son un caso aislado entre el elenco de supuestos cómicos de TV3. Si hace dos días el actor del programa Polònia profería un exabrupto machista, insinuando que la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ejerce la prostitución, este martes le ha tomado el relevo Jair Domínguez, haciendo un paralelismo entre los jueces del Tribunal Supremo y los jabalís.

Domínguez, copresentador junto a Toni Soler del programa Està Passant de la televisión pública catalana, se ha hecho célebre por sus salidas de tono tanto en antena como en las redes sociales. Y esta vez ha centrado su agresividad verbal contra los jueces del Tribunal Supremo, a los que ha dirigido este comentario a raíz de la declaración del presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, en el juicio del procés: "Faltan siglos para que el discurso de Cuixart arraigue en las mentes del tribunal. Es como hablar de Hegel a un jabalí".

"Cubo de mierda" a Arrimadas

Al igual que Albà, el presentador de TV3 tampoco pasó por alto el pasado fin de semana el viaje de Arrimadas a Waterloo para hacer un discurso ante la mansión del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont. Domínguez le dedicó esta frase a la líder de Cs: "Altsasu, Amer, Waterloo, e ir haciendo hasta que alguien le tire un cubo de mierda por la cabeza (que es lo que busca)". 

Este comentario molestó al diputado y compañero de Arrimadas en Cs, Toni Cantó, que se lo afeó en Twitter. La réplica de Domínguez fue la siguiente: "Toni, te equivocas, Esto no es violencia. Como tampoco es violencia decir que me quiero mear en tu boca. Confundís los términos". Días antes, Domínguez había retuiteado otro mensaje en el que llamaban "trozo de mierda" al líder de Cs, Albert Rivera.

Amenaza de muerte

El presentador televisivo, asimismo, ha denunciado este martes una amenaza de muerte recibida a raíz de sus alusiones a Arrimadas por parte de un exaltado en Twitter. Un mensaje deleznable y cargado de odio que ha propiciado que Twitter suspendiera la cuenta del agresor.