La hiperactividad de Ada Colau a favor de los dirigentes independentistas se ha saldado con un sonoro portazo en la cara por parte de estos últimos. La alcaldesa de Barcelona puso el sábado en cuestión a la Justicia española enviando una carta a las instituciones europeas para criticar el juicio del procés. El domingo, ejerció de anfitriona en el Ayuntamiento de un acto a favor de los políticos en prisión preventiva que terminó con unos 400 alcaldes pidiendo a gritos la "independencia". El martes, se manifestó contra el juicio y por el denominado "derecho de autodeterminación" junto a la plana mayor del PDeCAT y ERC en la plaza de Sant Jaume. Y hoy, apenas unas 24 horas después, se queja amargamente de que éstos hayan boicoteado los Presupuestos del Gobierno de Pedro Sánchez.
La alcaldesa de Barcelona ha advertido este miércoles de que el bloqueo de las cuentas en el Parlamento supone un grave error, tanto por su marcado contenido social, como por abrir la puerta a unas elecciones generales "que puede ganar la derecha y la extrema derecha".
"Perjudica a la población"
"Bloquear unos presupuestos sociales es un error histórico: perjudica a la población, tanto en Cataluña como en España, y abre la puerta a elecciones que puede ganar la derecha y la extrema derecha. Por intereses partidistas se perjudica a la gente, especialmente a los más vulnerables. Una irresponsabilidad", ha manifestado Colau en su perfil de Twitter.
La alcaldesa, asimismo, ha remarcado que "no aprobar el inicio del trámite de los Presupuestos implica seguir con la política de Rajoy y poner los servicios básicos en peligro. Significa acabar con la esperanza que supuso la moción de censura contra el PP", ha indicado.
Colau, en el acto del domingo en el que cientos de alcaldes acabaron pidiendo a gritos la independencia
Medidas rechazadas
Entre las medidas que PDeCAT y ERC han rechazado junto a PP y Ciudadanos para tumbar las cuentas del Gobierno figuran algunas como, por ejemplo, elevar el peso del gasto social hasta el 57% del total; 220 millones adicionales en medidas contra la violencia de género; un aumento de la inversión en medidas contra la pobreza infantil y la dependencia (hasta un 60% en este último caso); la rebaja de las tasas universitarias y de la edad para percibir la prestación a parados de larga duración a los 52 años; la subida del IRPF a las rentas más altas --unos dos puntos a partir de los 130.000 euros anuales, y cuatro a partir de 300.000--; la tasa Tobin del 0,2% para determinadas transacciones financieras; reducciones del IVA en productos de higiene femenina (del 10% al 4%) o servicios veterinarios (del 21% al 10%); un tipo mínimo del 15% para grandes empresas en el impuesto de sociedades; o el recorte del 25% al 23% del impuesto de sociedades para pymes que facturen menos de un millón de euros, entre otros.
La indignación de Colau ha sido de tal magnitud que ha colgado un vídeo en su Facebook en el que resume las consecuencias políticas del voto del PDeCAT y ERC. Con el rostro desencajado, ha asegurado que no se cree que los independentistas voten, junto a Cs y PP, "contra los presupuestos más sociales de las últimas décadas".