La ministra de Justicia, Dolores Delgado, durante su intervención en la sesión de control al Ejecutivo que hoy tiene lugar en el Congreso de los Diputados / EFE

La ministra de Justicia, Dolores Delgado, durante su intervención en la sesión de control al Ejecutivo que hoy tiene lugar en el Congreso de los Diputados / EFE

Política

Los abusos en entornos religiosos en Cataluña llegan a la cúpula de la Iglesia

Tras los nuevos casos el Ministerio de Justicia ha decidido pedir explicaciones a la Conferencia Episcopal Española

7 febrero, 2019 12:02

La ministra de Justicia, Dolores Delgado, ha anunciado que va a pedir a la Conferencia Episcopal Española toda la información referente a casos e investigaciones abiertas sobre los presuntos abusos por parte de representantes de la iglesia a menores de edad.

Delgado, entrevistada en los Desayunos de Televisión Española, ha explicado que esta misma semana ha pedido a la Fiscalía General del Estado que le mantenga informada sobre las diligencias abiertas en los tribunales sobre cualquier caso que tenga que ver con el abuso sexual en colegios religiosos, congregaciones o instituciones religiosas de cualquier índole.

Los casos en Cataluña, el detonante

Los recientes escándalos que han ido saliendo a la luz en los últimos meses han acabado por colmar la paciencia del Gobierno. Casos como el del Abad de Montserrat, la investigación abierta en los Jesuitas de Cataluña son solo algunos episodios concretos, que se suman a los ya conocidos de los abusos sexuales en los Maristas de Barcelona.

La ministra ha querido recalcar que “la verdad es importante”, tanto como para las personas que han sufrido esos abusos como para los que los llevaron a cabo, para prevenir futuras agresiones. Dolores Delgado ha explicado que con esa documentación persigue “enriquecer” el anteproyecto de Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia.

La prescripción

El hecho de que no paren de salir nuevos escándalos de abusos y agresiones sexuales “preocupan mucho” al Gobierno que busca, a través de esa ley, frenarlos con reformas como por ejemplo la del régimen de prescripción de este tipo delitos cuyo plazo empiece a contar a partir de que la víctima cumpla 30 años y no a los 18, como actualmente.

Con esa medida, los niños que sufran esos abusos podrán tener la madurez suficiente para denunciarlos, finalizó la ministra.