La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha pedido al Gobierno que evite una “militarización del centro” de la capital catalana durante la celebración del Consejo de Ministros del 21 de diciembre. En declaraciones a los medios desde Fira Barcelona, asegura que traslada esta reclamación al Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez en lugar de la Generalitat porque es el que convoca en la Casa Llotja de Mar la reunión.

La alcaldesa reivindica que se debe “garantizar un verdadero funcionamiento normal de la ciudad” durante la reunión. Recuerda que los comerciantes ya han advertido de que el próximo viernes es una jornada clave para la temporada de Navidad, el momento de ventas más fuertes que se espera que anime una temporada de invierno irregular por la tardanza en la llegada del frío y las lluvias constantes que han alejado a los compradores de las tiendas.

Demanda de los comerciantes

Las demandas de los comerciantes se han dirigido de forma especial a la Generalitat. Se han sentado incluso con la consejera de Empresa y Conocimiento Àngels Chacón para reclamar que incidan en que las movilizaciones convocadas por varios sectores del independentismo sean pacíficos. La política de PDeCAT les ha dejado claro que hará todo lo que esté en su mano para conseguir este fin.

El problema es que incluso las propias organizaciones empresariales, que se han unido en esta demandas, son conscientes de que la incidencia del Govern en este sentido es limitado. Sí que tienen entrada en la ANC y en algunos sectores de los CDR e Intersindical-CSC, el sindicato que ha convocada una huelga general de dos horas para alentar a los trabajadores a unirse a la protesta en la calle. Pero no llegan a La Forja y los GAAR, los grupos más minoritarios pero que prometen que harán todo lo posible para evitar la celebración del Consejo de Ministros.

Movilizaciones pacíficas anteriores

Se teme un choque entre algunos manifestantes y las fuerzas de seguridad que afecte el “normal funcionamiento de la ciudad” que exige la alcaldesa. Colau ha señalado que “Barcelona ha sido escenario de muchas movilizaciones amplias y masivas” en el pasado reciente sin que se haya reportado ningún incidente, por lo que espera que “esto se reproduzca”.

Ha dejado claro que “Barcelona es una ciudad abierta” y que espera que el encuentro del Consejo de Ministros en la Casa Llotja de Mar no se quede en una simple fotografía. Pide a Sánchez que impulse “propuestas constructivas de cara a Cataluña” en la reunión.

La alcaldesa coincidirá con el presidente del Gobierno y su equipo económico un día antes, en la noche empresarial que tendrá lugar en Foment del Treball, la entrega de las medallas y los premios Ferrer Salat.