La Casa Llotja de Mar, el edificio histórico de la Cámara de Comercio de Barcelona / CG

La Casa Llotja de Mar, el edificio histórico de la Cámara de Comercio de Barcelona / CG

Política

Los comerciantes desconfían del dispositivo policial del 21D

El comercio y la restauración de Barcelona piden a la Generalitat que mande un mensaje de calma en su fin de semana ‘dorado’ del año

14 diciembre, 2018 00:00

La escalada de tensión que se vive a una semana de que Pedro Sánchez reúna al Consejo de Ministros en la Casa Llotja de Mar de Barcelona ha encendido las alarmas de los comerciantes de la ciudad. La amalgama de organizaciones sectoriales ha reclamado al Govern de Quim Torra que dé un mensaje de calma y que asegure que la reunión se podrá mantener sin altercados importantes. Ha recibido mensajes de que la seguridad está asegurada por parte de la Generalitat en este sentido, pero el contexto de los últimos días ha propiciado que se pongan en cuarentena estas palabras.

Los propietarios de tiendas y restaurantes dudan de que el dispositivo policial llegue a disipar los altercados. La palabra que más repiten es “incertidumbre”. Buscan un compromiso en firme de que se evitará que la llamada a la movilización de ciertos sectores del independentismo se convierta en un nuevo choque en las calles de la ciudad.

Protestas de mayor intensidad

Han avisado de que saldrán a la calle en contra de la reunión los CDR, la ANC e Intersindical-CSC, el sindicato promovido por el entorno de Carles Puigdemont. Aunque se teme de forma especial el enfrentamiento que pueda existir entre los cuerpos de seguridad, sea cual sea su uniforme, y los colectivos La Forja y GAAR, los que reclaman protestas de mayor intensidad e incluso prometen que harán todo lo posible para boicotear el Consejo de Ministros.

“Pedimos a todo el mundo paz social y estabilidad económica”, indica el nuevo presidente del Consejo de Gremios de Barcelona, Joan Guillén, una de las últimas entidades que se han sumado al manifiesto público para que se mantenga la “normalidad social e institucional” en Barcelona. El clima necesario para “garantizar el desarrollo económico y una actividad positiva en plena campaña de Navidad”, tal y como indica el documento.

Fin de semana ‘dorado’

Cabe tener en cuenta que la reunión del Consejo de Ministros tendrá lugar el primer día del llamado fin de semana dorado para el comercio. El último antes de la Navidad en el que las familias suelen concentrar sus compras. Y en Barcelona será en esta ocasión más importante que nunca. La campaña de invierno empezó de nuevo tarde por las buenas temperaturas del principio del trimestre, las lluvias que les siguieron y que se han mantenido durante semanas --las precipitaciones del otoño han sido de las más importantes de los últimos tiempos-- han alejado a los clientes de las tiendas.

El dispositivo de seguridad de la Casa Llotja de Mar ya ha empezado con vistas a la reunión del consejo de ministros el 21D / CG

El dispositivo de seguridad de la Casa Llotja de Mar ya ha empezado con vistas a la reunión del consejo de ministros el 21D / CG

El dispositivo de seguridad de la Casa Llotja de Mar ya ha empezado / CG

Se espera que entre el 21 y el mediodía del 24 de diciembre se concentren la mayor parte de las compras navideñas. Si se producen altercados en las calles de la capital catalana por el choque entre policía y manifestantes peligra mantener esta actividad. Se espera que en este escenario los compradores prefieran desplazarse hasta otras ciudades del extrarradio para realizar sus compras, algo especialmente negativo para el tejido de pymes y establecimientos multimarca del sector.

Calma y ‘proporcionalidad’

“Pedimos a todas las partes calma y proporcionalidad”, indica el presidente de Amics de Passeig de Gràcia, Lluís Sans. Cabe tener en cuenta que la llamada Milla de Oro de la ciudad es por donde discurren la mayoría de las manifestaciones que tienen lugar en la urbe. El recorrido tradicional es por esta vía y por Via Laietana, una calle que casi sigue el paseo barcelonés y que llega hasta el litoral. Concretamente, hasta la Casa Llotja de Mar donde se reunirá el Gobierno.

Sans reclama que la “Generalitat ponga todo lo que sea necesario por su parte para que se respeten los derechos de todo el mundo”. Y esta petición incluye los de los comerciantes. “Somos conscientes de que se trata de una situación compleja, pero también pedimos que nos entiendan a nosotros”, reclama Guillén.

Manifestaciones pacíficas

El responsable de Amics de Passeig de Gràcia también recuerda que los comerciantes ya han sufrido las consecuencias de una Navidad sin luces en buena parte de la ciudad, hecho del que culpan al Ayuntamiento de Ada Colau, y exigen la “actitud coherente y responsable” de la Generalitat en el 21D.

Juan Carlos Iglesias, uno de los principales empresarios de la restauración de la ciudad a través de GrupIglesias, remarca que los “catalanes han dado cumplidas muestras de comportamientos civilizados en las infinitas manifestaciones que han tenido lugar en un pasado reciente”. Afirma que los organizadores de las protestas del 21D no deberían dejar que sus “ideas se contaminasen” por comportamientos “hostiles y violentos” que promueven otro tipo de colectivos.

Asimismo, afirma que las “reivindicaciones de derechos de todo tipo no debería perjudicar a los demás”. Los propietarios de bares y restaurantes también piden poder trabajar con total normalidad el próximo viernes en Barcelona.