El Govern de la Generalitat acusa al Gobierno español de no haber movido un dedo para modificar la situación de los políticos presos. No es suficiente, a juicio del presidente Quim Torra, que la Abogacía del Estado haya rechazado el delito de rebelión. Y el propio Torra aseguró este mismo viernes que el independentismo no podrá apoyar los presupuestos del Estado. ¿Pero qué pasa en el Congreso, qué posición mantendrán los diputados independentistas a partir de ahora? Ese debate se ha intensificado en las últimas horas, con un cruce de acusaciones en las redes sociales, provocado en gran medida por Pilar Rahola, la gurú del independentismo, que aprovecha su tirón mediático para lanzar propuestas radicales.
Sus apelaciones a los diputados del Congreso han sido directas, al señalar a Joan Tardà y Gabriel Rufián, diputados de Esquerra Republicana, y a Míriam Nogueras, diputada y vicepresidenta del PDeCAT, que tomen una decisión. “Pensáis continuar yendo al Congreso como si no hubiera pasado nada? Tal vez es el momento de plantarse”, ha asegurado.
Bajar la pelota al suelo
Se trata de una líder mediática, pero también de una asesora de todo el mundo político que rodea al expresidente Carles Puigdemont. Rahola coincide con Puigdemont en la idea de superar el debate de partidos con el impulso de la Crida Nacional per la República, que no tiene ningún horizonte ideológico, y que tiene un componente populista notable.
Mientras en el PDeCAT no se contesta a esa interpelación, aunque los diputados consultados por Crónica Global tienen claro que se deberá “esperar”, bajar la pelota al suelo y mantener las relaciones con el Gobierno de Pedro Sánchez, en el otro lado tampoco se da carta de naturaleza a la petición de Rahola.
Rahola, con Puigdemont, en su casa en Cadaqués
Ocupar todas las tribunas
Ha sido Eduard Voltas, activista y editor, cercano a Esquerra Republicana, quien ha dejado claro que los diputados independentistas deben mantenerse en el Congreso, sin mezclar las cosas. “Totalmente en contra de retirar los diputados de Madrid. En las puertas del juicio, es necesario ocupar todas las tribunas de denuncia posibles, y más todavía. Si se trata de mantener el rechazo en el Congreso, es suficiente con votar no a todas las propuestas”.
Las dos posiciones han encontrado adictos y detractores en las redes sociales, con distintas propuestas alternativas, como “no hablar en el Congreso”, hacer ruedas de prensa fuera del hemiciclo “en catalán”, y limitarse a votar sin pronunciar discursos.
La posición de Esquerra
Se trata de un debate interno que muestra las diferencias y las contradicciones entre los sectores que apoyan a Carles Puigdemont y Esquerra Republicana, que, pese a todo, quiere esperar y ver qué ocurre en los próximos meses, sin romper amarras con el Gobierno de Pedro Sánchez.
Esquerra ha visto cómo toda la atención política se centra en la figura de Oriol Junqueras, el político al que se le pide la pena más alta, de hasta 25 años de cárcel. Eso ha creado una gran preocupación en el partido, pero, al mismo tiempo, sus estructuras de poder se preparan para ocupar la centralidad en Cataluña y gobernar en los próximos años.