La Generalitat ha aprobado el proyecto de ley de ordenación del litoral, cuya finalidad es gestionar de forma integrada la costa catalana con nuevos instrumentos de ordenación y un régimen económico y financiero propio que asegure los recursos suficientes para invertir en la mejora de este ámbito.
La ley ha sido presentada hoy por el consejero de Territorio y Sostenibilidad, Damià Calvet, quien se ha referido a la necesidad de que el Govern disponga de recursos propios. Por ello, entre las medidas aprobadas por el Consell Executiu figura la creación de un canon a favor de la Generalitat sobre el rendimiento económico de aquellas concesiones que ocupan permanentemente el dominio público marítimoterrestre, como por ejemplo los restaurantes. Se calculan unos ingresos de medio millón de euros que irán destinados a financiar actuaciones de mejora de la costa.
En la gestión del litoral concurren tres niveles administrativos: Gobierno español, Generalitat y ayuntamientos. De ahí la necesidad, ha dicho Calvet, de impulsar normativas integrales, que contempla la creación de un Plan de ordenación del litoral catalán y de planes de usos del litoral y las playas.
Un total de 70 municipios costeros cuentan con 596 tramos de playas, de los que 336 son urbanos y 260, naturales. Las playas catalanas ocupan 259,56 kilómetros de los 714,4 de litoral.
La "anómala" decisión del Supremo
Por otro lado, la consejera de Presidencia y portavoz, Elsa Artadi, ha calificado de “sorprendente y anómala” el cambio de criterio del Tribunal Supremo sobre los impuestos hipotecarios. El impuesto sobre actos jurídicos y transmisiones patrimoniales es gestionado por la Generalitat, por lo que la agencia tributaria catalana y la agencia de consumo del Govern “están activados para asesorar a los usuarios”.
Rambién se ha referido a la conversación telefónica de Pablo Iglesias, líder de Podemos, con Carles Puigdemont, así como de la visita del podemita al republicano Oriol Junqueras en la cárcel de Lledoners. “Se comentó la actualidad política, pero Iglesias no vino como mensajero de Pedro Sánchez. Se habló de la necesidad de tender puentes y reforzar el contactos y diálogo con diferentes partidos. No hay ninguna oferta por parte de Sánchez para sentarnos en una mesa de reunión”, ha explicado en referencia a la negociación de los presupuestos generales del Estado y al ultimátum lanzado por el presidente Quim Torra sobre la aplicación del derecho a la autodeterminación.