Tercera dimisión de un alto cargo de Sánchez en tres meses
El cese de Montón se une a los del exministro de Cultura por fraude fiscal y al de la exdirectora general de Trabajo por el registro de un sindicato de trabajadoras sexuales
11 septiembre, 2018 20:55Tres dimisiones en tres meses. El cese de la ministra de Sanidad, Carmen Montón, por el escándalo de su máster se une a otros dos altos cargos del Gobierno de Pedro Sánchez. En los tres casos, la reacción del Ejecutivo ha sido fulminante y la crisis se ha resuelto en horas.
El primero se produjo a los pocos días de que prosperara la moción de censura del PSOE y estuvo protagonizado por Máxim Huertas, nombrado ministro de Cultura, pero que tuvo que abandonar el Ejecutivo tras descubrirse que había cometido un supuesto fraude fiscal, y que había sido condenado por ello. Una serie de tuits en los que menospreciaba la práctica del deporte, negociado que también le competía, también empañaron su breve mandato.
Amor a la cultura
"A veces hay que retirarse y eso hago. Yo amo la cultura y por eso me retiro. Me voy con la misma humildad que hace siete días", dijo en una comparecencia sin preguntas. Aseguró ser víctima de una jauría.
Más recientemente fue la directora general de Trabajo, Concepción Pascual, tras asumir la responsabilidad de que el Boletín Oficial del Estado publicara el registro de un sindicato de trabajadoras sexuales. El "gol" metido a la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, según dijo ella misma, desmontaba la vocación feminista del nuevo Ejecutivo.
Calvo montó en cólera
"La directora general de Trabajo, Concepción Pascual, ha presentado su dimisión, que ha sido aceptada por la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio", aseguraba el comunicado difundido por el ministerio. "La decisión de Concepción Pascual se produce al asumir voluntariamente todas las responsabilidades del registro de los estatutos de OTRAS, la Organización de Trabajadoras Sexuales. Este registro se ha efectuado ante la dirección de la que Concepción Pascual era la máxima responsable", concluía el escrito notificado el pasado 3 de septiembre.
Tal como explicó este diario, los hechos trascendieron en vísperas de que la vicepresidenta y portavoz del Gobierno, Carmen Calvo, compareciera en el Congreso para explicar la puesta en marcha de las medidas del Pacto de Estado contra la Violencia de Género. Fuentes socialistas aseguraron que Calvo montó en cólera al conocer que el Ministerio de Trabajo había dado luz verde a la creación de este sindicato.