Rajoy: “No voy a designar a nadie como mi sucesor”

Mariano Rajoy, expresidente del Gobierno, ha anunciado que el congreso extraordinario para elegir a su sucesor al frente del Partido Popular (PP) se celebrará entre el 20 y el 21 de julio en Madrid. Así lo ha decidido la junta directiva de la formación este lunes por la mañana. El proceso será “transparente, democrático y sin miedos ni recelos”, ha asegurado el aún líder popular tras el encuentro. Y ha dejado claro que no seguirá los pasos de José María Aznar: “No voy a designar a nadie como mi sucesor, no tengo ningún derecho para influir”.

En un intento de marcar distancias con el su predecesor, que se ha ofrecido para reconstruir el centro derecha, ha asegurado que no cuenta con “sucesores ni delfines”. Incluso ha justificado esta libertad al partido para elegir quién debe ser el próximo presidente por la “lealtad inquebrantable más allá de lo que había que esperar”. "Ninguna de las personas que puedan optar a la presidencia del partido necesitan mi apoyo", ha apostillado. 

Elección de candidatos

“No podría hacer distingos entre unos y otros con los que he trabajado mano a mano en los últimos años”. Concretamente, en los 14 que ha pasado como presidente.

Ahora, se abre un periodo de 15 días para que todos los interesados en tomar las riendas del PP formalicen sus candidaturas. Hay varios nombres sobre la mesa, como el del presidente de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, el de la número dos del partido, María Dolores de Cospedal, y el de la exvicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría.

Primarias a dos vueltas

La listas que finalmente se presenten deberán someterse a un proceso de primarias a dos vueltas. Las bases del partido se pronunciarán en una primera votación, que se plantea como una criba. Con superar el 10% de los apoyos de la militancia se pasará a la segunda vuelta.

Es decir, las candidaturas se presentarán finalmente al congreso de finales de julio. Será en ese momento cuando se pronunciarán los delegados que estarán presentes en la convención. Serán ellos los que decidan finalmente quién debe presidir el PP en los próximos años.

Periodo de interinidad

Rajoy ha prometido que asumirá hasta entonces las responsabilidades de su cargo. “Cumpliré con mi responsabilidad hasta el último momento”, ha anunciado. Asegura que en el próximo mes y medio se abre un periodo de “interinidad” en el partido “sin cambios” en su gobernanza.

Todos los cargos de la formación están confirmados hasta la fecha del congreso. El aún presidente del PP explica que la única diferencia notable a partir de ahora será que sólo intervendrá “lo justo y necesario” para que la formación no se paralice. “Es importante finalizar bien el proceso que ahora empezamos”, ha advertido.

Marcha de Moncloa

En cuanto a la moción de censura, ha reiterado el mensaje de que el PP ha ganado las últimas tres elecciones generales en España. Las de 2011, 2015 y la repetición electoral de 2016. Recuerda que mantiene una clara mayoría tanto en el Congreso como en el Senado --en este último caso, absoluta-- y acusa a un “club de agoreros de guardia” de desahuciarles del poder.

Una “amalgama de socialistas, independentistas, partidos de extrema izquierda, Bildu incluído” que se han unido para echarles de Moncloa. Rajoy también ha sacado pecho de los logros conseguidos en los mandatos populares. Reivindica especialmente dos políticas, el fin de la crisis y la desaparición de la banda terrorista ETA “a cambio de nada”. Un toque de atención sutil tras los anuncios que el nuevo Gobierno socialista ha hecho ante el actual gran conflicto territorial que está vivo en el país, el independentismo en Cataluña.

Rajoy no ha hecho ni mención a los escándalos de corrupción que acechan al partido y que han ayudado al triunfo de la moción. Todo ello, mientras de forma paralela a su comparecencia ante los medios la Audiencia Nacional confirmaba la financiación ilegal del PP en Valencia. Otra ramificación del caso Gürtel.