La Mesa de la Parlament ha aceptado la delegación de voto de Toni Comín, exconsejero catalán de Salud que actualmente se encuentra fugado en Bruselas. De esta forma, los independentistas allanan el terreno de una investidura efectiva.
Toni Comín había solicitado la delegación de su voto en Sergi Sabrià, actual portavoz de ERC. De esta forma, Junts per Catalunya y los republicanos suman 66 escaños para poder ser mayoría en una segunda votación en un supuesto debate de investidura, aunque la CUP se abstenga.
¿Quién será candidato?
Los antisistema habían vetado hasta ahora las candidaturas independentistas que no fueran Puigdemont –quien también tiene reconocido el voto delegado y lo ejerció en el anterior Pleno ordinario--, ya que le consideran el “presidente legítimo”.
La gran incógnita es a quién propondrán los secesionistas como candidato. Hay de plazo hasta el 22 de mayo. De lo contrario, se tendrían que convocar elecciones. JxCAT ha afirmado que la prioridad es Puigdemont, Jordi Turull y Jordi Sànchez, todos ellos con investiduras fallidas por estar en la cárcel o en el supuesto exilio. También han aparecido otros nombres más efectivos --Marc Solsona, Antoni Morral...--, pero el expresidente catalán asegura que se ha ganado el derecho a administrar sus tiempos.