RSF lamenta los "tres meses negros" de la prensa en Cataluña

Reporteros sin Fronteras (RSF) ha lamentado hoy jueves, 1 de febrero, los "tres meses negros" que vivió la libertad de prensa en Cataluña de octubre a diciembre de 2017. La oenegé ha constatado que se creó "una atmosfera irrespirable" en la región, con insultos y coacciones a los periodistas.

En un informe presentado en Madrid, la organización ha tildado el último trimestre del año pasado como el periodo "más negro de la historia democrática" de la autonomía en lo que respecta al derecho a la información.

"Si el conflicto que ha enfrentado durante los últimos años a las fuerzas independentistas catalanas con el gobierno central ha ido pasando una lenta pero constante factura al periodismo en la región, los últimos tres meses de 2017 figuran ya entre los más negros de la historia democrática en cuanto a libertad de prensa en Cataluña se refiere", concluye el documento.

"Señalamiento y linchamiento"

La oenegé ha recalcado los casos de "insultos" y "acosos" a periodistas constitucionalistas e independentistas en la región de octubre a diciembre, coincidiendo con el periodo de repunte del desafío secesionista.

Ello se produjo hasta un nivel, multiplicándose en septiembre y octubre, "que ha sido difícil realizar un censo pormenorizado, creando una atmósfera irrespirable para la libertad de información en Cataluña".

En el resto de España, RSF ha destacado los casos de "ciberacoso, de amenazas y ataques avivados por señalamientos desde el poder, linchamientos en redes sociales, amedrentamientos, agresiones físicas y hostigamientos". Ello ha dificultado "ha dificultado extraordinariamente la labor de la prensa".

Ataque de Arran a 'Crónica Global'

El informe de Reporteros sin Fronteras no incluye el reciente ataque perpetrado por Arran --que lo reivindicó hasta tres veces-- contra las instalaciones de Crónica Global, ya que sólo cuenta los casos de acoso hasta diciembre.

Los cachorros de la CUP pintarrajearon y rompieron a martillazos la cristalera de la redacción en Barcelona del medio digital la madrugada del pasado 25 de enero, jactándose de ello en las redes sociales.

La agresión del grupo juvenil radical generó una corriente de condena y solidaridad con la empresa periodística atacada.