El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha reprochado algunas actuaciones del presidente de la Generalitat destituido, Carles Puigdemont, como que se echara atrás en la convocatoria de elecciones cuando empezaron a llamarle traidor. Además, ha dicho del candidato de Junts x Catalunya que sus hechos "rozan el ridículo".

"Un gobernante tiene que oír a la gente y oír lo que le dice la calle, pero tiene que tener personalidad para tomar decisiones y actuar de conformidad con el interés general. Y no se puede asustar porque hay 2.000, 3.000 o 5.000 manifestantes llamándole traidor. Eso no lo hace un buen gobernante", ha declarado Rajoy, tras negar que Puigdemont le anunciara que fuera a convocara elecciones anticipadas.

Desmiente a Marta Rovira

 

En una entrevista en Telecinco recogida por Europa Press, el presidente del Gobierno ha calificado de "calumnia" y "falsedad" las declaraciones de la dirigente de ERC Marta Rovira acusando al Ejecutivo del PP de amenazar con muertos en la calle si seguía la hoja de ruta independentista. "Es mentira, es una calumnia y una vergüenza que se pueda llegar a esos niveles", ha enfatizado.

Dicho esto, ha retado a la número dos de ERC a que dé el nombre de la persona que amenazó con muertos en Cataluña. "Si se ha atrevido a decir una mentira de estas características, por qué no se va a atrever a decir de dónde saca ella esa información", ha apostillado, para recalcar que su Gobierno no ha "amenazado a nadie".

Además, Rajoy ha puesto en valor la aplicación del artículo 155 de la Constitución cuando se cumple un mes de puesta en marcha, subrayando que los funcionarios están cumpliendo con su función tras el cambio "traumático" que se ha producido al asumir las riendas de la Generalitat el Ejecutivo central. Y ante las elecciones del 21 de diciembre, se ha mostrado convencido de que las cosas "van a ir bien" para aquellos partidos que creen en la defensa de la ley y la soberanía nacional.

Defiende la actuación policial el 1-O

Por otra parte, ha defendido la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado durante la jornada del referéndum ilegal del 1 de octubre en Cataluña, destacando que trabajaron en "una situación de extrema dificultad", aunque ha admitido que fue criticada en Europa. "No hay obra humana que sea perfecta", ha apostillado.

"Dieron la cara y cumplieron con su obligación a las órdenes del poder judicial", según Rajoy. "Intentaron evitar que se celebrara un referéndum que el Tribunal Constitucional dijo que era ilegal", ha añadido el presidente sobre la consulta independentista promovida por el Govern cesado de Carles Puigdemont, al que atribuye que se produjeran "cosas indeseadas" durante aquella jornada.

"Atentado contra la democracia"

Rajoy ha calificado la convocatoria del referéndum como un "atentado muy duro contra la democracia", señalando que desde la Generalitat "se empeñaron en hacer cosas que no podía autorizar". "Pensaron que el Estado no podría defenderse o que el presidente del Gobierno iba a mirar a otro lado, pero nadie va a permitir nunca que España se trocee", ha proclamado.

El presidente ha evitado opinar sobre si los miembros del Govern cesado de Puigdemont que han sido encarcelados deberían poder hace campaña para las elecciones catalanas del 21 de diciembre en libertad. "Yo no puedo entrar a opinar sobre las decisiones que tomar los jueces o fiscales, y respetaré las decisiones que tomen porque el principio básico de la democracia es la separación de poderes", ha afirmado esquivo.

Además, ha elogiado a José Manuel Maza, el fiscal general del Estado fallecido la semana pasada en Argentina, y a José María Romero de Tejada, el fiscal superior de Cataluña que ha muerto este mismo lunes, por su lealtad al país y a la Constitución. "Son un símbolo para España", ha enfatizado.

La reforma de la Constitución

Finalmente, ha garantizado al líder del PSOE, Pedro Sánchez, que está dispuesto a "hablar" de la reforma de la Constitución pero ha avisado de que esa reforma "en ningún caso" puede ser "un premio" para los que han pretendido liquidarla", ya que, según ha dicho, eso sería "un disparate" y un "mal mensaje para todos".

Así se ha pronunciado Rajoy al ser preguntado por las declaraciones de Pedro Sánchez --en un desayuno informativo con el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, organizado por Europa Press-- emplazándole a cumplir "su palabra" y abrir en 2018 los trabajos para reformar la Carta Magna como le prometió en los días previos a la aprobación del artículo 155 en Cataluña.

Si esta mañana Rajoy ya respondió que él cumple "siempre" sus "compromisos", esta noche ha precisado que se comprometió a "hablar" de esa reforma constitucional. Según ha puntualizado, de esa reforma de la ley fundamental "se habla mucho" y ahora se trata de decir qué es lo que hay que cambiar y exponer "contenidos".

"Yo estoy dispuesto a hablar. No estaba entre mis prioridades la reforma de la Constitución porque creo que hay cosas mucho más importantes y urgentes que hacer en España, pero yo desde luego no me niego a hablar, sobre todo si esto sirve para resolver problemas", ha manifestado.