La ley de transitoriedad jurídica que preparan JxSí y la CUP prevé sustituir el Tribunal Constitucional (TC) por una Sala de Garantías catalana. El proyecto de norma también buscará crear un Tribunal Supremo (TS) catalán, en caso de el sí gane en el referéndum de independencia del 1 de octubre si finalmente se celebra.
De esta forma lo ha explicado el diputado de la CUP, Benet Salellas, en una entrevista de Europa Press. Durante la misma, ha desvelado detalles de la ley que debe certificar la independencia y sentar las bases de la transición del ordenamiento jurídico actual a uno catalán.
Según Salellas, la nueva normativa está redactada desde hace meses, aunque sometida a cambios.
En secretismo
Salellas explica que la CUP no ha compartido la visión "casi sagrada" de JxSí sobre esta ley --cuya elaboración ha estado envuelta en un gran secretismo-- y no cree que sea omniresolutiva, si bien ha constatado que a lo largo de su elaboración ambos partidos la han ido redefiniendo, dándole finalidades y objetivos.
El diputado de la CUP, uno de los ponentes de la ley, explica que la norma explicita cómo funcionará el proceso constituyente y establece como se resolverían en una Cataluña independiente aquellas competencias que ahora pertenecen a la Administración del Estado. Aclara que no se trata de una constitución en sí misma, precisamente porque es el proceso constituyente que prevén tras el 1-O el que debe dibujarla y concretar las instituciones definitivas.
Sin embargo, la ley --que aún no se ha hecho pública ni ha empezado su tramitación-- ya incluye algunas de las instituciones necesarias para suplir el papel del Estado o el Poder judicial.
"No se trata de cambiar el sistema judicial catalán, pero si de dotarnos de las instituciones necesarias para no continuar utilizando el Tribunal Supremo (TS) de Madrid o el TC, pero continuaremos teniendo TS y TC".
Nuevo Supremo catalán
El nuevo Supremo catalán mantendrá el mismo nombre y hará de máxima institución del sistema judicial en Cataluña, y contará con un espacio donde se debatirán materias constitucionales y de garantías de derechos, es decir, la nueva Sala de Garanties.
"Para el TC buscamos una fórmula diferente porque pensamos que la última etapa de alguna forma nos pide cambiar la nomenclatura para no reproducir una institución que ha sido tan antidemocrática en relación con la soberanía de Cataluña", ha asegurado
Nacionalidad catalana
El redactado de la norma también acorta los plazos para que los extranjeros puedan obtener la nacionalidad catalana: "Reduce unos plazos que son absolutamente, me atrevería a decir, racistas que tiene la legislación española", expone.
"La república tiene que ser un instrumento para cambiar las condiciones de vida de la gente", ha concluido el diputado cupaire, que incide en que los cambios que han introducido en la norma en los últimos meses son pequeños detalles y que responden a la excepcionalidad del momento y a los acontecimientos que se van sucediendo.
Proceso constituyente
Salellas ha narrado cómo en la construcción del texto los ponentes se han debatido entre introducir algunos cambios con respecto al marco legal estatal y esperar a hacerlo en proceso constituyente posterior al referéndum, para no condicionar ese proceso.
"Hay aspectos que a nosotros nos habría gustado de aprovechar esta ley para abordarlos y que realmente tiene sentido que las dejemos para el proceso constituyente", ha concluido Salellas.
Si ganara el sí a la independencia en un eventual referéndum de octubre, los soberanistas plantean el impulso de un proceso constituyente catalán donde "deberán levantarse las paredes maestras del nuevo Estado" y "la elaboración de una constitución catalana".