UDC se reinventa dispuesta a tender puentes con otras fuerzas catalanistas

Unió Democràtica de Catalunya (UDC) se reinventa. A la espera de solucionar sus problemas económicos, todavía en manos judiciales, la formación que en su día lideró Josep Antoni Duran Lleida prepara su futuro convencida de que existe un espacio electoral catalanista, alejado de los postulados independentistas, que necesita un referente. No obstante, los dirigentes de Unió son realistas y admiten que es necesaria no solo una catarsis que conduzca a la creación de un nuevo instrumento político, sino también alianzas con otras corrientes catalanistas como Lliures, que el miércoles se presentó en sociedad con el exconsejero de CDC Antoni Fernández Teixidó como principal impulsor.

Malestar por la decisión de Montañola

En conversación con Crónica Global, dirigentes de UDC precisan que su carácter humanista y democristiano dista mucho del contundente liberalismo que representa Lliures. Es más, confiesan que la incorporación de Roger Montañola, secretario de Política Sectorial de Unió, a esta plataforma política ha sorprendido, e incluso molestado, a los miembros de UDC. “Montañola apenas ha arrastrado a gente de Unió a esta nueva plataforma”, aseguran estas fuentes. Pese a ello, UDC quiere tender puentes, no solo hacia Lliures, sino a las futuras corrientes del catalanismo socialdemócrata. El punto de partida de esa nueva etapa tendrá lugar el próximo 5 de noviembre, dos días antes del 85 aniversario de la fundación de UDC, con la reunión del Consejo Nacional de este partido. El cónclave servirá como acto de reafirmación de las bases respecto a unos valores cristianos y humanistas que quieren poner en valor.

Actualmente, el número de militantes de UDC asciende a 3.500, una cifra que no dista tanto de la de sus antiguos socios convergentes, PDECat, alrededor de 11.000, teniendo en cuenta el momento difícil por el que atraviesa Unió, actualmente sin representación parlamentaria.