Pedro Sánchez, en la sede del PSOE, en la calle Ferraz de Madrid.

Pedro Sánchez, en la sede del PSOE, en la calle Ferraz de Madrid.

Política

Dirigentes del PSOE dudan de que Pedro Sánchez deba repetir como candidato

Dentro del partido hay malestar por la intención del secretario general de aplazar el congreso socialista

26 diciembre, 2015 13:58

Problemas para el líder del PSOE, Pedro Sánchez, dentro de su partido. A la presión de los barones socialistas para que renuncie a su plan de explorar un pacto postelectoral con Podemos y otras formaciones de izquierda para llegar a La Moncloa, se une el malestar interno por su intención de consagrarse de facto como candidato en el caso –nada descartable– de que haya que repetir elecciones. De hecho, ambos fenómenos van unidos. Y ya ha habido declaraciones dudando de que Sánchez sea el candidato idóneo. Una situación de lo más tenso, antes del Comité Federal que celebran los socialistas este lunes.

"Se pueden ver otras opciones". Así opinó esta semana de contundente el presidente de la Generalitat valenciana y líder del PSPV, Ximo Puig, preguntado por si Sánchez debería repetir como candidato a la presidencia del Gobierno en caso de repetición de elecciones. Puig, considerado como muy próximo a la presidenta andaluza y gran rival de Sánchez, Susana Díaz, ha sido el único barón que se ha atrevido a cuestionar en público estos días el liderazgo de Sánchez. Pero en privado es diferente.

Dirigentes socialistas han expresado esta semana su malestar por lo que consideran una maniobra de Sánchez para asegurarse que repite como candidato en caso de nuevas elecciones. En la reunión de la ejecutiva del partido del lunes, justo tras los comicios, Sánchez apuntó que propondría aplazar el próximo congreso del partido, previsto para febrero.

El calendario

Su argumento: que para entonces aun se estaría en plenas negociaciones para formar gobierno. El argumento de sus críticos: que, si se convocan nuevas elecciones sin que el PSOE haya celebrado su conclave, Sánchez resultará proclamado de hecho como candidato, sin debate alguno. De fondo, otras cuestiones.

Sánchez resultó elegido el año pasado como secretario general del partido, pero no necesariamente como candidato –y, para algunos, como solución temporal en época de renovación–. Logró también ser proclamado aspirante a La Moncloa. Pero no sin dificultades, y con un liderazgo contestado desde diversas federaciones. Con Andalucía y Susana Díaz a la cabeza.

Los peores resultados en unas generales

Una situación de nulo control del partido a la que no ayudan los resultados del domingo. Y es que, más allá de las difusas opciones de Sánchez para gobernar –con un pacto con Podemos que rechazan los propios barones socialistas–, no hay que olvidar que el PSOE ha obtenido sus peores resultados históricos en unas generales.

Ante este escenario, la oposición interna al liderazgo de Sánchez y a un pacto con otras fuerzas de izquierda se hibridan. Y es que, además de que los barones críticos con Sánchez rechazan un acuerdo con Podemos –con el principal argumento de la "integridad territorial"–, rechazan también que Sánchez pueda afianzarse al frente de Ferraz. Por contra, consideran que Díaz, que no se atrevió a dar el año pasado el paso de batallar con Sánchez en las primarias, sí podría hacerlo ahora.