El presidente de la Generalitat, Artur Mas, con el grupo de expertos que han presentado la propuesta para la nueva Agencia Tributaria Catalana

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, con el grupo de expertos que han presentado la propuesta para la nueva Agencia Tributaria Catalana

Política

La Hacienda catalana no obligará a pagar impuestos, será voluntario

La Generalitat afirma que el nuevo sistema se basará "en la cooperación y confianza" con el contribuyente, lejos del modelo basado en el "control y el castigo"

18 agosto, 2015 13:53

El Gobierno de la Generalitat ha presentado recientemente la 'propuesta estrella' del proyecto secesionista: la creación de una Agencia Tributaria Catalana como herramienta para que Cataluña gestione sus impuestos.

El presidente de la Generalitat fue el encargado de presentar el nuevo modelo de Administración tributaria afirmando que tenían "las ideas, el talento, el conocimiento y las personas para hacer una Hacienda propia", pero matizó que faltaban "las condiciones políticas para que este proyecto coja cuerpo y se pueda llevar a la práctica".

Sin amparo legal

Mas es consciente de que, por el momento, su estructura estrella es sólo un proyecto de difícil concreción. Y es que no sólo faltan "las condiciones políticas", sino también el amparo legal. Hoy por hoy, en la España autonómica, es el Estado quien tiene absolutas competencias en el ámbito fiscal, a excepción del País Vasco y Navarra.

Desde la consejería de Presidència de la Generalitat han explicado a CRÓNICA GLOBAL que la nueva Agencia tiene la función que ya tenía anteriormente: recabar los impuestos y transferirlos al Estado.

Si la Generalitat se mantiene en la esfera de la legalidad, la Agencia Tributaria Catalana solo consistirá en una duplicidad: el contribuyente podrá realizar un paso intermedio declarando sus tributos al órgano catalán, que este transferirá al Estado.

69 municipios inscritos

Desde la Generalitat se ha informado de que a día de hoy son 69 las administraciones locales que han ingresado la liquidación del IRPF, de las cuales 16 más también han ingresado el IVA.

En este mismo periodo el ente tributario ha percibido más de seis millones de euros de las corporaciones locales y 715.000 de particulares y de empresas.

Los alcaldes de las poblaciones que han optado por liquidar sus impuestos en la nueva agencia señalan que es una oportunidad histórica única para alcanzar la independencia de Cataluña.

En 1979 Cataluña podría haber tenido Hacienda propia

El presidente de la Generalitat también ha reconocido que "fue un error" no apostar por la Hacienda propia en el Estatuto de 1979: "Si no tenemos hacienda propia es por los errores propios y porque cuando se intentó corregir nunca se encontró la más mínima comprensión en el otro lado para intentar que Cataluña tuviera un sistema de financiación diferenciado, incluyendo la aspiración de una hacienda propia con mayúsculas".

La cuestión sobre una financiación propia y exclusiva levanta ampollas en muchos sectores. El PP ya ha manifestado en más de una ocasión que no piensa cambiar el régimen fiscal autonómico. Y las diferencias entre el PSC y el PSOE se han agudizado tras la propuesta de los socialistas catalanes de alcanzar un pacto fiscal para Cataluña. Asimismo, la integración Europea --congelada por la crisis económica-- prevé avanzar hacia una unión fiscal que pondría en entredicho los modelos forales de País Vasco y Navarra.

Distinguirse del modelo español de "control y castigo"

Los trabajos, que plantean cómo debe ser la Administración tributaria en un sistema fiscal avanzado, recogen los principales avances en gestión tributaria consolidados en los últimos años en los países que consideran "más desarrollados del mundo".

En esta línea, los expertos del Govern rechazan el modelo español por considerar que pone "por delante el control y el castigo", y afirman que se inspiran en modelos "como el de Suecia y Australia". Además, para distinguirse del modelo español sostienen que el sistema catalán se basará en el "cumplimiento voluntario de las obligaciones tributarias".

Nadie paga voluntariamente

Esta definición ha levantado las suspicacias de economistas, que sostienen que como todos los demás tributos públicos, el impuesto se cobra coactivamente y que la facultad de crearlo y cobrarlo es parte de la condición soberana del Estado y de las potestades del gobierno.

A la espera de nuevos acontecimientos, los expertos de la Agencia Tributaria Catalana se limitan a explicar que el objetivo principal del modelo de fiscalidad presentado es la "confianza" para "promover la conciencia fiscal".