Cospedal, a favor de desalojar el estadio de la final de Copa si se silba el himno nacional

Continúan las declaraciones que piden una actuación contundente en la próxima final de la Copa del Rey, que disputarán el F.C. Barcelona y el Athletic de Biblao, en el caso de que las aficiones de ambos equipos silben al Monarca y al himno nacional en los prolegómenos del encuentro, como ya sucedió en las dos últimas finales entre ambos equipos, en 2009 y 2012.

Ahora le ha tocado el turno a la presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, que se ha mostrado a favor de que se desaloje el estadio en el que se juegue la final -aun por determinar- si se producen de nuevo los abucheos.

"Si uno no quiere ir a ver la Copa del Rey, que no vaya", ha exclamado Cospedal, en un desayuno informativo en Cuenca. "Y si un equipo no está conforme, pues que no juegue", ha añadido.

Una argumentación similar hizo en su día la expresidenta autonómica madrileña y ahora candidata a la alcaldía de la ciudad, la también popular Esperanza Aguirre, que pidió a Barça y Athletic que no jugaran la final. Aguirre, aunque no llegó a pedir explícitamente que se desalojara el estadio, sí lo insinuó, cuando alabó la postura del ex presidente francés Nicolás Sarkozy, que promulgó una norma al respecto en 2008. "Si en un partido de fútbol se silba la Marsellesa, el partido se suspende y se juega días después a puerta cerrada. Con ese aviso se acabaron las bromas", declaró Aguirre.

La Liga también opinó

Incluso desde los estamentos deportivos se ha opinado. "¿Suspender la final? ¿Por qué no?", afirmó la semana pasada el presidente de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) Javier Tebas. Quien, no obstante, no tiene ninguna competencia en la final de Copa, que organiza la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).

Este mismo jueves, el Consejo Superior de Deportes (CSD) ha propuesto sancionar con 60.000 euros a una web ultraderechista por tildar de "cerdos vascos y catalanes" a los aficionados que acudirán a la final, y por sugerir "echarlos al mar".

También la semana pasada, desde la RFEF se recordó que no hay una normativa legal que permita desalojar un estadio deportivo porque se produzcan abucheos. También se puntualizó que recurrir a la ley de 2007 contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte para desalojar el estadio sería una "aplicación muy forzada" de la norma, porque silbar el himno es una "postura política" que no implica "violencia".