El Gobierno estudia recurrir las 'embajadas' de la Generalidad
El ministro de Exteriores señala que las nuevas delegaciones de la Generalidad en el extranjero no se están abriendo para defender los intereses de las empresas catalanas, sino como parte del proyecto de los partidos secesionistas. Añade que sería "más barato y eficiente" que los delegados autonómicos trabajaran desde las embajadas de España.
4 febrero, 2015 17:52El presidente de la Generalidad, Artur Mas, y sus aliados de ERC han situado como una de las prioridades inmediatas de su proyecto secesionista, y más concretamente de las denominadas "estructuras de Estado" que pretenden desarrollar y potenciar, aumentar la presencia del Gobierno autonómico en el extranjero. Este mismo lunes, la Generalidad nombró dos nuevos 'embajadores', para las 'embajadas' de inminente apertura en Roma y Viena, y anunció que planea pasar de las siete delegaciones operativas en el exterior a medio centenar. Pero el Gobierno podría abortar este proyecto. O eso está estudiando.
Así lo ha anunciado este miércoles el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, José Manuel García-Margallo, que ha explicado que el Ejecutivo se está planteando la posibilidad de recurrir ante la justicia, por la vía contencioso-administrativa, la apertura de las delegaciones de la Generalidad en Roma y Viena.
Entrevistado en el programa Espejo Público de Antena 3, Margallo ha indicado que el Gobierno tiene de plazo hasta final de mes para presentar un recurso contra la apertura de estas dos 'embajadas' catalanas, y que también podría recurrir, de la misma forma, futuras nuevas aperturas de delegaciones de la Generalidad en el exterior.
Margallo ha razonado que estas 'embajadas' "van contra la Ley de Acción Exterior" a nivel nacional. Y, de hecho, también ha anunciado que el Ejecutivo se está planteando igualmente recurrir ante el Tribunal Constitucional la ley autonómica catalana de Acción Exterior, bajo la cual se están abriendo las nuevas delegaciones de la Generalidad en el extranjero. El plazo para presentar el recurso de inconstitucionalidad vence el 11 de marzo, cuando habrán pasado tres meses de la entrada en vigor de la ley.
Lamenta que se abren por el proyecto secesionista
Margallo ha dado razones políticas para el movimiento que se plantea el Gobierno. El ministro ha opinado que las nuevas delegaciones de la Generalidad en el extranjero no se están abriendo para defender los intereses comerciales de las empresas catalanas, o para difunudir la lengua y la cultura propia, sino con otro objetivo muy concreto: "alentar el proceso secesionista", según ha afirmado. "Es obvio que eso no lo pueden hacer desde una embajada española, yo no lo toleraría", ha añadido el ministro.
En la misma línea, Margallo, ha señalado que las embajadas de España ya defienden los intereses de las empresas y los ciudadanos de Cataluña, así como promueven la cultura catalana. "Si es para eso, pueden contar con nosotros; si es para alentar el proceso secesionista, desde luego que no", ha expresado.
El ministro también ha señalado que sería "más barato y más eficiente" que los delegados autonómicos en el extranjero se instalaran en las embajadas españolas, donde, además de que hay "expertos en todo", la presencia del embajador facilitaría los contactos a los representantes autonómicos. Igualmente, ha indicado que el dinero que la Generalidad destina a las nuevas 'embajadas' deja de estar disponible para otras partidas, como educación o sanidad, según ha señalado.
Este mismo miércoles, el PP catalán ha secundado la intervención de Margallo desde el Parlamento autonómico, donde su diputada Eva García ha recriminado al consejero de Presidencia, Francesc Homs -responsable de la acción exterior de la Generalidad- que se esté "sacando embajadas de la chistera", y ha ironizado preguntándose si lo hace "porque le sobra el dinero".