Política

El Tribunal de La Haya falla que Serbia y Croacia no cometieron genocidio

El presidente del alto tribunal de la ONU, Peter Tomka, ha leído la sentencia para ambos casos. En primer lugar, ha destacado que "Serbia no cometió genocidio en Croacia durante la guerra" de los Balcanes, lo mismo que ha reiterado después en relación a los croatas durante la Operación Tormenta que Zagreb desplegó en el verano de 1995, y en la que las víctimas fueron serbios y serbocroatas en su territorio.

3 febrero, 2015 13:16

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha rechazado este martes las acusaciones mutuas de genocidio por parte de Croacia y Serbia y ha repartido las responsabilidades entre ambos países por las muertes de civiles durante la guerra de los Balcanes que originó la descomposición de la antigua Yoguslavia.

El presidente del alto tribunal de la ONU, Peter Tomka, ha leído la sentencia para ambos casos. En primer lugar, ha destacado que "Serbia no cometió genocidio en Croacia durante la guerra" de los Balcanes, lo mismo que ha reiterado después en relación a los croatas durante la Operación Tormenta que Zagreb desplegó en el verano de 1995, y en la que las víctimas fueron serbios y serbocroatas en su territorio.

La CIJ ha señalado la "responsabilidad" de Belgrado y de Zagreb "por no prevenir el genocidio". Tomka ha considerado que para formalizar una acusación por genocidio "es necesaria la intención deliberada de acabar con los miembros de un grupo, ya sea física o psicológicamente", y ha añadido que "la corte no reconoce pruebas suficientes para demostrar estas evidencias”.

El presidente al Alto Tribunal internacional ha proseguido con que no se han encontrado pruebas de genocidio en todos los casos analizados: "La Corte encuentra condiciones de genocidio en algunos pero no en todos los casos analizados y presentados en el caso que enfrenta a Croacia y Serbia”. El magistrado ha ilustrado el ejemplo con el caso de la ciudad de Vukovar: "Serbia no puede ser acusada de genocidio en Vukovar ya que no existía como Estado en ese periodo”.

En 1999 Croacia puso una denuncia donde afirmaba que el ejército de Yugoslavia, encabezado por los serbios y a las órdenes de Belgrado, cometió actos de genocidio en sus ataques a Vokovar y Skabrnja en 1991. Serbia presentó su caso en el 2010, afirmando que fuerzas croatas cometieron genocidio durante el éxodo de 200.000 serbios que huían del avance croata.

Las relaciones entre Serbia y Crocacia se han normalizado a partir del fin de la guerra en 1995. Ahora, la sentencia de La Haya concluye el litigio entre ambos países con la afirmación de una cierta “responsabilidad de Serbia por no prevenir el genocidio”, pero otorgando culpas mutuas por la muerte de millares de civiles.