Un dolor de cabeza menos para el ex presidente del F.C. Barcelona Joan Laporta y el resto de integrantes de su última Junta Directiva. El juzgado de primera instancia número 39 de Barcelona ha desestimado la acción de responsabilidad que presentó el club blaugrana contra Laporta y 16 de sus directivos, en la que les reclamaban hacer frente a las pérdidas de 47,6 millones de euros que, según el Barça, se originaron durante el mandato de Laporta. El club podría presentar recurso ante esta decisión, aunque todo indica que la directiva actual, que encabeza Josep María Bartomeu, dará por cerrado el tema.
La decisión la ha comunicado este martes por la mañana el juez José Manuel Martínez Borrego a los directivos implicados, algunos de los cuales han celebrado efusivamente la noticia en las redes sociales. El primero de ellos ha sido Xavier Sala i Marín, economista, activista independentista y presidente de la comisión económica del Barça con Laporta: "Desestimada la demanda del Barça contra la junta de Laporta. Nembé", ha publicado en Twitter.
La acción de responsabilidad, presentada por el F.C. Barcelona poco después de la llegada a la presidencia de Sandro Rosell, iba dirigida contra Laporta y los integrantes de su última Junta Directiva: Xavier Sala i Martín, Magda Oranich, Alfons Godall, Jaume Ferrer, Joan Boix, Albert Perrín, Jacint Borràs, Alfons Castro, Josep Cubells, Rafael Yuste, Josep Antoni Colomer, Maria Elena Font, Jordi Torrent, Xavier Bagués, Patrick Auset y Josep-Ignasi Macià.
La demanda
El club presentó la demanda en 2011, tras aprobarlo en una polémica asamblea de socios en la que Rosell, a pesar de haber impulsado personalmente la acción de responsabilidad, en el momento de la votación a mano alzada, y antes que el resto de socios, optó públicamente por la abstención.
La Junta de Rosell consideró que el balance que presentó el equipo de Laporta a su salida del club no respondía a la realidad. Por ello, encargó una nueva auditoría que sostuvo que los 11,9 millones de euros de beneficio presentados por Laporta para su último mandato fueron en realidad casi 80 millones de euros de pérdidas, con un balance, para el global de la época de Laporta al frente del Barça (2003-2010), de 47,6 millones de pérdidas.
Tras abandonar el club, Laporta se defendió de los cálculos de la Junta de Rosell con diversos argumentos técnicos, como que la Junta de Rosell computó como ganancias del ejercicio 2010-2011 -es decir, como ganancias suyas- partidas que tendrían que corresponder a la última temporada de Laporta en el Barça, mientras que sí contabilizó en el primer ejercicio de Laporta los avales de la temporada 2002-2003, anterior a Laporta.
Tras la dimisión de Rosell como presidente blaugrana, al ser involucrado en el caso Neymar, la acción de responsabilidad a Laporta empezó a convertirse en un asunto incómodo para la junta de Bartomeu, ya muy criticada por parte de la masa social, por cuestiones deportivas y extradeportivas. Bartomeu, no obstante, decidió no retirar la demanda. Pero sí manifestó recientemente que, en caso de que fuera desestimada, como ha ocurrido finalmente, no interpondría ningún recurso.