La ex portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y principal figura mediática de 'Guanyem Barcelona [Ganemos Barcelona]', Ada Colau, ha afirmado este viernes que el 9 de noviembre se plantea "votar sí-sí".
Aun cuando el referéndum secesionista -de improbable celebración- no ha sido ni siquiera convocado, y aun cuando, según ella, no ha sido "nunca independentista", Colau ha asegurado que, "como mucha otra gente", ve en el panorama de una consulta de esas características "una oportunidad de radicalidad democrática".
Colau ha planteado el 9N, en efecto, como el escenario de un "proceso destituyente de este régimen que estamos denunciando" y como la posibilidad de "empezar realmente a decidir las reglas del juego entre todos y todas". Bajo estas premisas, y siempre y cuando sea "un proceso ciudadano", entonces, la ex portavoz de la PAH daría el "doble sí" a un referéndum de autodeterminación.
"CiU no cree en la independencia"
La cara más conocida de esta nueva plataforma, que el jueves se presentaba en sociedad con el propósito de concurrir a las elecciones municipales de Barcelona en 2015, ha señalado que "cuando estos procesos son manipulados por los partidos se vacían de contenidos", y en esta línea ha agregado:
"Pienso que CiU no cree en el derecho a decidir y no cree en la independencia, sinceramente, porque si no actuaría en consecuencia y no impediría que otros hiciéramos consultas como el multireferéndum [del 25-M]".
Colau ha argumentado que, si uno cree "en la democracia", entonces cree "en Cataluña, España, Europa y el mundo entero. No puede ser que CiU se presente como la defensora del derecho a decidir y después se abstenga en la votación sobre la ley de abdicación". "Si hace falta", ha añadido, "hay que recorrer a la desobediencia civil para ejercer la democracia", ha sentenciado.
Con todo, la ex portavoz de la PAH ha asegurado que "hay una versión del independentismo, que busca la confrontación con España", que le "genera rechazo". "Cuando veo la Via Catalana [hacia la independencia] pienso: 'qué ganas'. Pero cuando ves a partidos políticos que llevan el debate hacia una escenificación en la que yo no me reconozco...", ha comentado, sugiriendo que en ese caso prefiere mantenerse al margen.