El presidente de la Generalidad, Artur Mas, ha explicitado este jueves su propuesta de diálogo al Gobierno en relación al reto independentista que él mismo avala y, más en concreto, respecto a la hipotética consulta sobre la secesión: "Ustedes no se metan".
En su intervención en la apertura de la XXX reunión del Círculo de Economía, en Sitges (Barcelona), y después de que el presidente de la entidad, Antón Costas, le pidiera un "esfuerzo" para darle "una segunda oportunidad" al diálogo con el Gobierno, Mas ha sido claro en su particular oferta de diálogo: pretende convocar la consulta según las leyes autonómicas, y pide al Gobierno que mire hacia otro lado.
"Si no quieren utilizar ninguna ley española para decir que se ha hecho una consulta, déjennos hacerlo con una ley catalana y no se metan", ha expresado Mas durante su intervención.
El presidente autonómico se ha referido así a la negativa del Congreso a autorizar a la Generalidad a convocar el referéndum secesionista mediante una cesión de competencias. Una negativa que ha dicho que puede "llegar a entender", porque, según ha dicho, "sería demasiado gordo" para los partidos de ámbito nacional, debido a la "presión política y de los medios".
En este sentido, ha pedido al Gobierno que "no se metan" si, como ha dejado claro que es su intención, convoca la consulta de acuerdo con la futura ley autonómica de consultas, que está previsto que elabore el Parlamento autonómico en los próximos meses.
"Si esta ley se aprueba, convocaré la consulta de acuerdo con la pregunta pactada", ha dicho Mas, aludiendo a las dos preguntas consensuadas a finales del año pasado entre CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP.
"Un acto de agresión añadida innecesario"
Mas también ha avanzado las posibles respuestas del Gobierno a la aprobación de esta ley. Una, la que él pide, mirar hacia otro lado. La otra, impugnar la ley ante el Tribunal Constitucional, y que este "no tenga mas remedio que hundirlo todo". Y se ha posicionado de entrada ante esta segunda posibilidad: "Si además nos hunden la legalidad catalana, esto sería un acto de agresión añadida innecesario", ha declarado.
El presidente de la Generalidad ha hablado igualmente del día siguiente a esta hipotética consulta -de improbable celebración-. Dando tácitamente por hecho una victoria del independentismo, ha explicado que la consulta no sería "vinculante desde un punto de vista jurídico", sino que sólo daría un "mandato político" para el Ejecutivo autonómico.
Así, ha dicho que después de la consulta habría que "implementar" este mandato "negociando con ustedes", refiriéndose al Gobierno, porque es una cuestión que "nos afecta a todos".
Se abre a una tercera vía
Mas se ha referido igualmente a una posible "tercera vía", una solución negociada que no pase por la independencia, pero tampoco por mantener el status quo actual. Y se ha abierto a esta posibilidad, pero insistiendo en que también tendría que "pasar por las urnas". Y al lado "de lo que las instituciones catalanas hemos pactado", aludiendo al hipotético referéndum, con las dos preguntas acordadas por CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP.
Mas ha cerrado su intervención con una nota de humor irónico. Después de que Costas expresara su deseo de volverlo a ver abriendo el año que viene el próximo encuentro del Círculo de Economía, como acostumbran a hacer los presidentes autonómicos, Mas ha dicho: "Espero". Ante las risas de los asistentes al acto, ha matizado: "Espero y confío".