El Parlamento autonómico ha aprobado este jueves una modificación ad hoc de la Ley de Centros Recreativos y Turísticos para tirar adelante el proyecto del complejo de ocio y juego BCN World en Tarragona de Veremonte, propiedad del promotor inmobiliario Enrique Bañuelos, con los votos incondicionales de CiU y PSC y el visto bueno matizado de ERC, PP y C's.
Entre los artículos más controvertidos de la nueva ley destacan los relativos a los impuestos -donde se incluye una rebaja fiscal del 55% al 10% para el macrocomplejo-, la instalación de casinos y máquinas de juego, el acceso de menores, cambios urbanísticos y la posibilidad de que los casinos concedan crédito a los jugadores.
CiU y PSC han dado su apoyo sin fisuras a las medidas anteriores, mientras que el PP se ha abstenido en la votación del articulado referente a la fiscalidad y urbanismo. También ERC, por su parte, se ha sumado a la modificación de la ley, pero ha rechazado, como el PP, este relevante bloque.
El resto de grupos ha denunciado que la ley se ha aprobado como un "traje a la medida" de Veremonte, en un trámite señalado por la falta de transparencia y por los interrogantes que todavía plantea el proyecto.