El ex diputado autonómico de Ciudadanos Jordi Cañas, que ha renunciado a su escaño en el Parlamento autonómico tras ser imputado por presunto fraude fiscal, ha defendido que "un representante público no puede estar sometido a un proceso de investigación que ponga en cuestión su papel". "Yo amo la política en cuanto a su capacidad de transformación y me gusta pensar que la política sirve para hacer justicia", ha declarado.
Cañas, que se ha convertido en el primer dirigente de la Cámara autonómica que abandona su acta de diputado tras ser imputado, ha argumentado, en una entrevista publicada este lunes por El Mundo, que "ser un representante público es una gran responsabilidad que nos obliga a tomar decisiones que estén a la altura de ese honor que nos dan los ciudadanos".
El ex mandatario de Ciudadanos, que ha suscrito la idea de que la política tiene que ejercer un "papel ejemplarizante", ha mostrado su convencimiento de que será tratado durante el proceso judicial "como un ciudadano normal sin ningún privilegio ni consideración negativa". "Respeto mucho a la Justicia", ha confiado, "me abstendré de intentar condicionar lo que yo espero que sea un proceso transparente y justo", ha añadido.
"Tienen la desvergüenza de negar" la crispación
Justo cuando la carrera secesionista comandada por el presidente de la Generalidad, Artur Mas, desvela mayores tensiones en la sociedad catalana, Cañas ha lamentado "no poder participar en un momento tan fundamental para la historia de Cataluña y del conjunto de España":
"Supongo que mis compañeros lo harán formidablemente. Me voy a perder este momento histórico tan importante y creo que algunos se alegran. Lo viviré desde la barrera".
De igual modo, el ex dirigente de la formación naranja ha reafirmado su convicción de que quienes lideran el proyecto independentista han incurrido en una "absoluta irresponsabilidad" por haber "llevado a la sociedad catalana a este punto de fractura de forma premeditada y planificada". "Tienen la desvergüenza de negarlo", ha criticado Cañas, quien por ello ha esgrimido "la necesidad de que dejen cuanto antes sus cargos públicos".
"El principal problema de Cataluña ahora mismo es un gobierno irresponsable y unos partidos que provocan la fractura. Hay un discurso del odio a España y algo más peligroso que es dividir a los catalanes entre buenos y malos en función de si son separatistas o no", ha lamentado el ex diputado autonómico de C's.
"Esa crispación quiere atemorizar" a los no nacionalistas
En este contexto, Cañas ha asegurado que la formación que lidera Albert Rivera tiene "la obligación de advertir lo que está sucediendo". "Hemos asumido la responsabilidad histórica en Cataluña de desenmascarar al nacionalismo. Además, debemos advertir lo que puede suceder y denunciar su discurso que transfiere la culpabilidad a los que sufren el bullyng separatista", ha indicado.
"A nadie le gusta que le pongan un espejo delante y vea lo feo que es su discurso", ha comentado. "Nosotros tenemos uno moralmente superior, ya que no dividimos a nadie y queremos los mismos derechos para todos y convivir en armonía y respeto", ha señalado.
Por ello, el ya ex dirigente de Ciudadanos -quien ha declarado que, "cuando esto acabe", volverá a la política activa, "si mis compañeros lo desean"-, ha confiado en que desde su formación seguirán "denunciando que esa crispación quiere atemorizar y silenciar a los contrarios a la deriva política de Cataluña perfectamente organizada y orquestada por los que han aprovechado un momento de debilidad del Estado por la crisis económica para conseguir su objetivo político, que planifican desde hace 30 años".