Las votaciones de las propuestas de resolución derivadas del debate sobre el estado de la nación han servido para que el Congreso de los Diputados vuelva a dejar claro a Artur Mas que su plan independentista tiene poco recorrido.
El pleno de la Cámara Baja ha aprobado una propuesta de resolución (con los votos del PP y de UPyD, y la abstención del PSOE y del PSC) que "respalda al Gobierno para que siga tomando, desde los principios de la defensa del interés general, la responsabilidad, la estabilidad y la moderación y en el ejercicio de su disposición al diálogo, cuantas medidas le permita el ordenamiento jurídico, para preservar la unidad de España, como una nación de ciudadanos libres e iguales sometidos únicamente al imperio de la Ley".
El texto también apela a "la concordia, la convivencia y el consenso como principios sobre los que se ha fundamentado la Constitución"; "reconoce" su vigencia, "especialmente, en el momento presente, en lo que se refiere a su expresión de que la soberanía nacional reside en el conjunto del pueblo español, del que emanan los poderes del Estado"; y "ploclama que, de acuerdo a esta realidad jurídica, legal y democrática, no puede una parte de la ciudadanía decidir lo que le corresponde al conjunto del pueblo español, ni una autoridad o poder público situarse por encima de la Ley".
Además, "recuerda que, en virtud de todo ello, no caben aquellas iniciativas, planes y resoluciones tomadas en cualquier ámbito institucional que rebasen los principios de soberanía y legalidad, que han permitido la mejor experiencia de democracia y convivencia de nuestra Historia"; y "valora la voluntad de diálogo expresada por el Gobierno en el marco de la Constitución Española y con absoluto respeto al ordenamiento jurídico, y su disposición a la defensa del marco democrático de convivencia que ha amparado el progreso político y social de nuestro país".
El PSOE pide dialogar sobre la "reforma del modelo de organización territorial"
La portavoz del PSOE, Soraya Rodríguez, ha justificado la abstención recordando que su partido "ya ha dicho no al reto soberanista", y asegurando que "votaremos no al referéndum de autodeterminación". "Pero no estamos dispuestos a que nos traigan una y otra vez mociones y propuestas; no estamos dispuestos a participar en el juego de acumular noes, para llevar a Cataluña un agravio más", ha añadido.
En este sentido, los socialistas han presentado una propuesta -rechazada por el PP- para crear una subcomisión de la Comisión Constitucional formada por representantes de los grupos parlamentarios, del Gobierno y de las CCAA para elaborar un "informe de actividades y conclusiones que permita articular las oportunas iniciativas de reforma del modelo de organización territorial".
Rodríguez ha insistido en que, frente al desafío secesionista del nacionalismo catalán, "exigir diálogo es defender la Constitución". Y que es "en nombre de la Constitución y desde la defensa de la unidad de España" que los socialistas proponen ese "diálogo necesario sobre la reforma del Titulo VIII".
Los nacionalistas insisten con el referéndum
También han sido rechazadas (con los votos del PP y la abstención del PSOE y el PSC) las propuestas de resolución presentadas por CiU, ICV y ERC que reclamaban al Gobierno negociar con la Generalidad para que se pueda celebrar un referéndum para la secesión de Cataluña.
El texto de CiU instaba al Ejecutivo a "iniciar un diálogo con el Gobierno de la Generalidad para posibilitar la celebración de una consulta a los ciudadanos de Catalunya para decidir su futuro".
La iniciativa de ERC planteaba al Gobierno "negociar con las fuerzas parlamentarias de Cataluña y el Gobierno de la Generalidad la celebración de una consulta que, utilizando los mecanismos legales previstos, permita conocer la voluntad de la ciudadanía de Catalunya sobre su futuro político".
Y la propuesta de ICV pedía al Gobierno delegar a la Generalidad la competencia para celebrar el referéndum independentista.
Cada uno de los tres grupos han votado a favor de las resoluciones de los otros dos, y han conseguido el apoyo del PNV y de la mayoría de formaciones del Grupo Mixto.