El alcalde de Barcelona, Xavier Trias (CiU) acumula en sus tres años de gobierno incumplimientos de proposiciones aprobadas en el pleno municipal, algo que él mismo denunció siendo jefe de la oposición como un hecho "no admisible de ninguna de las maneras".
El PSC ha denunciado que Trias ha cumplido un exiguo 20% de todas las proposiciones presentadas por la oposición y aprobadas en la cámara, que afectan a todos los ámbitos de gestión, desde la propuesta de un Plan de Cultura (que fue aprobada en marzo de 2011) hasta el compromiso de reducir el IBI a los comerciantes (enero de 2012).
Si bien estas resoluciones no son de obligado cumplimiento de acuerdo con la normativa, ignorarlas es considerado como una falta de respeto. El propio Trias declamaba solemnemente en 2009, cuando el entonces alcalde del PSC, Jordi Hereu, no evitó la subida de los precios del transporte público tal como había aprobado el pleno, lo siguiente: "No me cansaré de decir que la obligación del alcalde de Barcelona es defender las decisiones que se toman en el Pleno". Su partido ha hecho ahora lo propio y el PSC es quien denuncia esta vez.
"No lidera y no gobierna"
El gran número de incumplimientos ya no sorprende a ningúna formación con representación en el Consistorio, hasta el punto de que, en el último pleno, el PP ha presentado una singular proposición reclamando que el Gobierno municipal "ejecute los acuerdos adoptados en las comisiones y en el Plenario del Consejo Municipal, incluso aquellos en los que el grupo municipal de CiU ha estado en desacuerdo".
A su vez, el presidente del Grupo Municipal del PSC, Jordi Martí, ha criticado que Trias "solo ha cumplido una quinta parte de las proposiciones del plenario", lo cual, a su juicio, demuestra "que no lidera y no gobierna".
De los 26 plenos celebrados en el Ayuntamiento de Barcelona durante la presente legislatura se han votado 98 proposiciones de la oposición de las que se han aprobado 72, el 73% del total, gracias a que CiU gobierna en minoría. Pese a que, en algunos casos se han aprobado decisiones contrarias a la acción de gobierno, eso no significa, por lo visto hasta ahora, que vayan a aplicarse.