La estrella azulgrana Lionel Messi ha arremetido este viernes contra el vicepresidente económico del F.C. Barcelona, Xavier Faus, por las declaraciones del ejecutivo en las que éste se mostraba molesto por revisar cada seis meses la ficha del jugador.
Messi, que se encuentra en Argentina recuperándose de la lesión que sufrió en Sevilla y que le apartará del equipo hasta 2014, ha replicado duramente a Faus y, en una entrevista para El Món a Rac1, ha dicho de él que "es una persona que no sabe nada de fútbol y quiere manejar el Barça como si fuera una empresa, y no lo es".
"El Barça es el mejor equipo del mundo y debe ser representado por los mejores dirigentes", ha proseguido el jugador, quien ha remachado que "ni yo ni nadie de mi entorno pedimos ninguna renovación y eso lo sabe él muy bien".
"Lo que hacemos en estos partidos es 100% benéfico"
Asimismo, Messi no ha dejado de referirse a la supuesta implicación de su padre en una trama de blanqueo de dinero que tendría relación con los partidos benéficos organizados por su fundación. "Lamento profundamente lo que se está diciendo", ha comentado el azulgrana, "no sólo a mí sino a personas que quiero como mi papá o jugadores que son amigos", ha añadido.
Messi ha asegurado que "lo que hacemos nosotros en estos partidos es 100% benéfico", de modo que no ve razones para no confiar en la fundación Amigos de Messi que preside su padre. "Estoy profundamente unido a mi papá y a mi familia, en lo personal y en lo profesional. Si de mí depende seguirá siendo el presidente de la empresa y de la fundación", ha afirmado.
Mientras tanto, la investigación policial sigue en marcha, y diversos jugadores del F.C. Barcelona ya han declarado como testigos y está previsto que lo haga Jorge Messi, padre del futbolista, tan pronto como regrese a España. Estas declaraciones de Messi se producen después de que hayan circulado rumores que sugieran la posible venta del jugador para que el club pueda financiar el nuevo campo de fútbol. Según estos rumores, se evitaría al mismo tiempo el posible choque de liderazgos entre él y un ascendente Neymar.