Respaldo, sin dudas, del Consell Nacional del PSC a la propuesta de Pere Navarro en relación a su posición sobre el enfoque que los socialistas de Cataluña deben defender en relación al hipotético referéndum de autodeterminación que proponen CiU y ERC.
De los 309 consejeros presentes, 258 lo han hecho a favor de la propuesta de la dirección, que ha defendido el mismo Navarro; 41 de los consejeros han votado por la resolución que han defendido Joan Ignasi Elena y Àngel Ros, y que apostaba por reclamar un referéndum, con o sin acuerdo entre gobiernos; nueve votos han sido en blanco; y uno, nulo (cuyo sobre contenía las dos propuestas en lid).
La votación se ha hecho en urna y mediante el voto secreto, después de que al menos 43 consejeros lo pidieran por escrito a la mesa del Consell Nacional, presidida por Celestino Corbacho. Los consejeros han votado por una u otra resolución en una misma urna.
Tras el resultado, que ha puesto fin al Consell Nacional del PSC, Ros y Elena han declarado a los periodistas que no se sienten desautorizados por la dirección, pese al resultado obtenido por los críticos, que apenas ha llegado al 13,27% de apoyo interno.
Un texto crítico con CiU y ERC
La propuesta de resolución aprobada por el Consell Nacional del PSC consta de ocho puntos, entre los que se señala que "si para reformar el Estatuto o para aprobar la ley electoral" se ha decidido que se necesite el apoyo de dos terceras partes del Parlamento autonómico, "no se puede pretender que mayorías más débiles estén en condiciones de promover cambios más importantes".
Además, el máximo órgano de decisión del PSC entre congresos, reitera su apoyo al llamado documento Rigol y la moción aprobada en el Parlamento autonómico en la que insta a la Generalidad y al Gobierno a negociar la convocatoria de un referéndum independentista en Cataluña.
En esta línea, el texto aprobado por el Consell Nacional del PSC considera un "error llevar al Congreso de los Diputados iniciativas políticas de las que ni tan solo se ha garantizado previamente su toma en consideración", en referencia al principio de acuerdo entre CiU, ERC, ICV-EUiA y la CUP para pedir al Congreso que el Gobierno autorice la convocatoria de un referéndum a la Generalidad.
Así, los socialistas apuntan que no se puede "poner el carro ante los bueyes ni coger falsos atajos que no son otra cosa que callejones sin salida"; y menos aún si se quiere fijar una pregunta y una fecha de un referéndum de independencia de forma unilateral.
Votarán en contra
Por todo ello, el PSC considera que la propuesta que lideran Artur Mas, líder de CiU y presidente de la Generalidad, y Oriol Junqueras, líder de ERC, es un nuevo plan Ibarretxe, algo que los socialistas no quieren "repetir" esa "experiencia fallida".
"Nos reafirmamos en el criterio de votar contrariamente a cualquier propuesta o iniciativa legislativa relacionada con la consulta que no haya estado previamente negociada y acordada con el Gobierno de España", añade la propuesta del PSC aprobada este domingo.
Finalmente, los socialistas recuerdan que no son partidarios de "separar Cataluña del resto de España", ni de levantar fronteras, y sí de "tender puentes de diálogo y de acuerdo", en la línea de llevar a cabo una reforma constitucional.