Dicen los sabios que lo difícil no es llegar, sino mantenerse, y Crónica Global lleva diez años entre los medios de referencia del mapa mediático catalán. Nada es casualidad.

Crónica nació en un momento muy convulso en Cataluña. El independentismo se preparaba para darle un golpe a la democracia, y lo tenía todo a favor. Había casi un relato único.

Pero allí estaba Crónica, para poner frente al espejo a esos kamikazes que pretendían llevarnos al acantilado. Casi lo logran. Hubo fuga de empresas y ruptura social.

No fueron tiempos fáciles para nadie, pero mucho menos para quienes íbamos a la contra. Había tensión en cada rincón. Estábamos expuestos, pero nunca nos amedrentaron.

Lo intentaron, incluso con ataques con nocturnidad y alevosía a la antigua redacción. Pero aquellos años, en los que lo teníamos casi todo en contra, han dejado paso a otros, aunque queda mucho camino por recorrer.

Para muchos, éramos unos valientes; para otros tantos, unos españolistas extremistas. El tiempo pone a cada uno en su lugar.

El camino es la moderación y el sentido común que siempre defendimos, aunque no todos lo vieran así. Hay quien sigue sin verlo.

Aquí seguiremos para contar todo lo que acontece, en especial el resurgir de Cataluña y, esperemos, la solución a problemas tan preocupantes como la vivienda y la seguridad.

Porque esas son las cuestiones que preocupan a la ciudadanía. Hace cinco años, todavía estábamos recordando el procés… y llegó la pandemia.

Sin embargo, ahora los temas de interés son otros, como la sequía. Y las noticias son también otras, como el apagón. Y la corrupción política. Estamos en otro escenario.

Distinto, en efecto, pero que desde Crónica seguimos contando como si fuera el primer día: con periodismo y con historias inéditas que otros no pueden contar.

La fórmula pasa por tener y presumir de independencia, y de un gran equipo de profesionales, de distintas edades y procedencias, con los que se aprende a diario, cada uno en sus funciones.

Y por ser tan arrojados como antaño, y estar pendientes de las nuevas formas de presentar las noticias y los reportajes. Los tiempos cambian, pero el periodismo sigue.

Hace cinco años, en estas mismas páginas sugería que habría cambios en el sector. Todo va muy deprisa. Pero lo que nadie le podrá quitar a Crónica es el camino ya hecho.

Esta cabecera fue una de las primeras en implementar el muro de pago en España, y es el primer nativo digital con un libro de estilo, Así se escribe en digital.

Todo ello ha servido para consolidarla en lo más alto del mapa mediático catalán, disputándole mes a mes el liderazgo a La Vanguardia.

Vamos a por otra década, conscientes de nuestras fortalezas y, sobre todo, de nuestras debilidades, para mejorar y seguir ofreciendo la mejor información posible.

Pero, antes, disfrutemos de estos días de celebración. Gracias por la confianza. Que diez años no son nada… ¡pero dan para mucho!