Delgado: “Si somos conscientes de la gran ciudad que es Barcelona, no la pondremos en riesgo”
El presidente del Círculo Ecuestre señala que la política fiscal “influye en la toma de decisiones empresariales y personales”, y que Barcelona debe reaccionar
29 diciembre, 2019 00:00Antonio Delgado es el nuevo presidente del Círculo Ecuestre. Se expresa con claridad, en el amplio salón del edificio de la confluencia entre la calle Balmes y Diagonal. Desde esos ventanales, el club privado se conecta con una ciudad viva, cuyos ciudadanos se preguntan cada día cómo mantener y superar el peso económico, social y cultural adquirido. Esa es la preocupación de Delgado, profesor de Derecho Mercantil en Esade. Con 42 años, el reto del presidente del Círculo Ecuestre es atraer a socios más jóvenes y aprovechar el club como una gran plataforma de debate sobre las cuestiones que más preocupan, desde el pulso económico de Barcelona a la relación entre el humanismo y la tecnología. Delgado señala en esta entrevista con Crónica Global que Barcelona debe proyectarse con más fuerza y vigor. “Si somos conscientes de la gran ciudad que es Barcelona, no la pondremos en riesgo”, responde con convicción.
Antonio Delgado, durante la entrevista con 'Crónica Global' / LENA PRIETO
--Pregunta: ¿En el Círculo Ecuestre se mantendrá la recomendación de llevar corbata?
--Respuesta: La corbata, en el Círculo Ecuestre, ha marcado una forma de ser. Es un club en el que hay unas reglas, aunque depende de la situación y las actividades que se hagan. Pero el mayor o menor uso de la corbata dependerá de la decisión de nuestros socios. Ellos decidirán si se prescinde o si tiene otros usos, en determinados actos.
--¿Qué aportará al Círculo Ecuestre la presidencia de Antonio Delgado?
--En primer lugar, un gran compromiso, la ilusión de trabajar para mejorar el club, para mejorar una entidad que sea todavía más una referencia para Barcelona. Y con la intención de renovar perfiles, más jóvenes, que garanticen el futuro, con debates que sean vivos.
--¿Cree que podía haber hecho más el Círculo en esto últimos años?
--Creo que ha cumplido su papel. Ahora debe plantearse otros retos, con más diálogo, con debates centrados, por ejemplo, en el humanismo y la tecnología. De lo que se trata en un club como este es de crear un foro abierto a todo tipo de debates sociales.
--Se habla mucho de la sociedad civil, y de que el Círculo Ecuestre forma parte de ella. ¿Pero, existe realmente esa sociedad civil?
--Hay muchas definiciones sobre la sociedad civil, pero me parece que, al final, se trata de vehicular iniciativas privadas, sin una contribución estatal o administrativa. Y con el objetivo de contribuir al bien social. Existe, me parece claro. Otra cosa es cómo se haga.
--¿No considera que organismos como el Círculo Ecuestre podían haber alzado más la voz durante el proceso independentista?
--Yo creo que el club ha hecho lo que tenía que hacer, y debe seguir ahora fomentando debates y el diálogo sobre muchas cuestiones. Cada momento tiene sus circunstancias. De cara al futuro, queremos potenciar nuestro papel. Pero no me gusta comparar con el pasado.
--¿En qué puede incidir realmente un club como este?
--Un elemento central en el que podemos incidir es Barcelona. Nos vamos a centrar en eso, en los debates de la ciudad. Y en cuestiones, como decía, como el humanismo y la tecnología o la geopolítica, que pueden interesar mucho a los socios.
--¿Tienen usted y el Círculo la percepción de que Barcelona está perdiendo oportunidades?
--Es una buena pregunta para generar un debate. Se trata de una ciudad maravillosa, que funciona, pero hay señales que invitan a la reflexión. Y queremos ser parte de ese debate.
--Hay siempre una comparación permanente con Madrid. ¿Deberíamos olvidar esa comparación constante?
--Entre Madrid y Barcelona lo que debe haber es colaboración, y si podemos inspirarnos, y no sólo con Madrid, hacerlo. Esa relación es positiva, y vamos a buscar cómo canalizarla mejor.
--El Círculo es el club de una élite. ¿Existe el orgullo de pertenecer a esa élite, teniendo en cuenta que todos los países necesitan una élite?
--Somos un club social. Lo que queremos es ser una plataforma para el debate, y lograr la mayor formación posible para una sociedad. En eso, sí apostamos por una mejor formación, de todos.
--El Círculo Ecuestre difunde un ideario liberal, más libertad económica. ¿Es la sociedad catalana una sociedad liberal o el poder público tiene un excesivo peso?
--El Círculo Ecuestre nace de la iniciativa privada y es consustancial a su naturaleza el creer en el poder de esa iniciativa. Es lógico que exista un poder público fuerte que proteja al ciudadano, pero eso no puede llevar a los ciudadanos de una determinada sociedad, como podría ser la catalana, a confiar todo el bienestar en la administración pública y renunciar a la propia iniciativa. Los ciudadanos y las empresas, con su iniciativa, generan progreso, crean empleo y oportunidades, y es necesario generar las condiciones para que esto se produzca.
--¿Los miembros del Círculo Ecuestre consideran que hay realmente un factor que beneficia a Madrid, y que provoca el cambio de sedes sociales o empadronamientos de empresarios, a título individual, porque hay un mejor trato fiscal?
--No puedo hablar en nombre de los socios, pero es un hecho que la política fiscal influye en la toma de decisiones empresariales y personales. Que exista una mayor presión fiscal en Barcelona que en otros lugares, desde luego que no beneficia. No es un problema que se dé únicamente en España, sino que es una cuestión polémica también en la Unión Europea, donde en unos países hay más presión fiscal que en otros y eso puede generar desigualdades. Es una cuestión que se debe analizar en profundidad y no sólo desde un punto de vista económico sino también de protección del ciudadano y en relación a los servicios públicos.
--¿Los clubes privados, como el Círculo, son una cosa del pasado, o, se pueden poner en boga, ganar más prestigio porque se puede debatir con mayor libertad?
--Yo creo que tienen un gran futuro. Son lugares de encuentro personal y profesional, en los que se puede conversar sobre cualquier tema de manera sosegada y se tiene acceso a actividades que ayudan a informarse, reflexionar y aprender. Además, tienen unas instalaciones y servicio excelentes. Eso hace que sean muy atractivos. En el Círculo Ecuestre tenemos más de 400 socios menores de 40 años, que tienen su propia junta y organizan multitud de actividades que van desde temas de innovación hasta de emprendeduría. Uno de los objetivos de esta nueva junta es atraer todavía más talento joven a la masa social del club. Esta es una dinámica que tiene que preocupar a cualquier entidad de manera permanente. Queremos que los jóvenes inquietos, diversos y comprometidos con la sociedad civil nos perciban como su club de preferencia y se incorporen, aún en mayor número.
--¿En qué medida la sociedad civil ha contribuido a desarrollar la sociedad catalana tal y como es ahora, desde instituciones como Esade al propio Círculo Ecuestre?
--Creo que en gran medida. Este tipo de instituciones han sido capitales con sus contribuciones a la sociedad catalana, cada una desde su propia misión.
--¿Podrá explicarse en el Círculo algún dirigente de la CUP? ¿Cuando se convoquen elecciones?
--Sí. El Círculo Ecuestre es un foro de debate plural y con las puertas abiertas a todo el mundo. En todos los periodos electorales el Círculo Ecuestre se invita a todos los cabezas de lista de todos los partidos con representación parlamentaria, sin excepciones.
--¿Debe especializarse Barcelona en algún sector concreto para asegurar su futuro económico?
--Es sorprendente la cantidad de sectores en los que Barcelona es capital. De ahí el foro que hemos presentado hace una semana: Foro Barcelona Capital. Planificando el foro y analizando los sectores en los que Barcelona es puntera, uno se da cuenta de la gran ciudad que tenemos: diseño, gastronomía, tecnología, medicina, farmacia, videojuegos, moda nupcial, logística, emprendeduría… y un larguísimo etcétera. Tenemos que ser conscientes de lo que se ha conseguido en Barcelona en las últimas décadas. Y tenemos que ser conscientes de que, si no trabajamos para mantener y mejorar los logros obtenidos, se pueden perder rápidamente. Si somos conscientes de la gran ciudad que es Barcelona, no la pondremos en riesgo. Creemos que ahora es momento de detenerse y reflexionar sobre qué es Barcelona y qué retos de futuro tiene. Tenemos que saber hacia dónde ir y dónde concentrar nuestras energías, que seguro que no serán en un solo sector. Tenemos que recuperar el camino hacia el liderazgo internacional.
--Pongamos que soy un empresario joven, con vocación internacional, que quiero contribuir a proyectar mejor Barcelona. ¿Me hago socio del Soho House o del Círculo Ecuestre?
--La respuesta es sencilla, su sitio está en el Círculo Ecuestre. No solamente por ser de Barcelona, sino porque dada su vocación internacional, aquí aprenderá y confrontará opiniones e ideas sobre Barcelona y su sitio en el mundo que podrá difundir en cualquiera de los 200 clubes con correspondencia con los que estamos aliados en los cinco continentes. Precisamente esta red internacional, es uno de los mejores activos que tiene el club.