Rufián Scotch Club

(Whiskería Happy Polvo. 18 de julio de 2014. Oriol Junqueras y Marta Rovira, con gafas de sol y con las solapas de la gabardina tapándoles la cara, entran en el local).

Junqueras - ¿Estás segura?

Rovira – Qué sí, que Eduardo Reyes me lo ha asegurado. Aquí trabaja el charnegocatalán que necesitamos para penetrar en el electorado del área metropolitana.

Junqueras – No digas “penetrar” aquí, que ese tipo te está mirando con ojos golosos. Por cierto, gran término ese de charnegocatalán. Hemos de enviar un par de botellas de ratafía a Màrius Serra por su talento. Es único creando palabras.

Rovira – La de ‘guillotinaire’ para definir a nuestros chicos más inquietos es genial.

Junqueras – Al grano. Busquemos al Rufián ese, porque esta gabardina me está haciendo sudar como un poseso. Además queda rarito entrar en un local así con una chica.

Rovira - ¿Rarito? ¿Quieres decir que vienes por aquí?

Junqueras – Jamás. Nunca. Never. Mai. Me lo ha contado un pajarito.

Rovira – Mira, como Nicolás Maduro. Gran líder. Un buen ejemplo para nuestra Cataluña.

Junqueras – Prefiero la Cataluña de Banca Catalana. Ya sabes. ‘Pal de paller’, Jordi Pujol, Marta Ferrusola... Cada día me parezco más al presidente que construyó nuestro país. Sin veleidades andorranas, claro...

Rovira – Oriol, recuerda a Ausàs...

Junqueras – Un accidente. Tener en casa unos cuantos miles de cartones de tabaco le pasa a cualquiera. Una conspiración de la UDEF y de los malvados poderes unionistas del opresor Estado Español. En fin. ¿Quién es Rufián?

(Rovira saca de la gabardina una foto y señala a un camarero de la barra)

Junqueras – Muy buenas. ¿Gabriel Rufián?

Rufián – El menda. El que viste y calza. ¿Qué os pasa troncos? ¿Venís del Polo Norte? Estamos en el veranito ito ito, quitaros la gabardina que oléis a bacalao. Hablando de bacalao, tenemos aquí genero fino filipino. Veo que vienes con la chati. ¿Quieres un maromo para él o lo que buscas es un menaje a trua? Yo os puedo servir, prenda, que tienes unos ricitos que me ponen tanto que a ti te lo haría casi gratis.

Rovira - ¿Casi gratis? ¿Me harías pagar?

Junqueras – Marta, no te desvíes del tema. Señor Rufián, no le tire los tejos, no hemos venido a ejercer el comercio del sexo. En la Cataluña independiente no será necesario porque todas las necesidades serán cubiertas por la República, y con el reparto diario de helado que haremos entre todos los ciudadanos no hará falta la pulsión erótica para calmar las neurosis producidas por una sociedad injusta.

Rufián - ¿Lo cualo?

Junqueras – Queremos que sea el representante de la catalanocharnegada en el Congreso de los Diputados si nos convencen sus cualidades.

Rufián – Mis cualidades si quieres te las enseño ahora mismo. A ti y a tu chati. Vámonos a un reservado y las ves. Pero lo de la catalanonosequé me lo dices en la calle. A mí y a este amiguito (enseña el puño).

Rovira – Gabriel, no te enfades. Queríamos decir de los honrados ciudadanos del área metropolitana. Es un término acuñado por uno de nuestros intelectuales.

Rufián – Qué raro habláis. ¿De dónde habéis salido? ¿De Jarvarz o de la Soborna?

Rovira – Sorbona. No digas “soborna” que hay micrófonos unionistas en todas partes. Venimos de parte de Eduardo Reyes.

Rufián - ¡Haberlo dicho antes! Los amigos del ‘perla’ son mis amigos. Gran tipo. El rey del tinto de verano. Cuántas risas nos hemos echado juntos compartiendo un container a la hora de mear. Hemos vivido tantas aventuras tirando los tejos a las chatis en la Royal Disco invitándolas a unos Dyc cola, que es casi un hermano. Que digo un hermano. Somos corazón y sangre. Pescadito y rebozado. Don Simón y La Casera.

Junqueras – Siga, siga. ¿Le gusta trabajar aquí?

Rufián – No está mal. Las bebidas son de garrafón, pero uno ya tiene el cuerpo hecho. Y el jefe está tan borracho que no se entera si le das un tiento. Además se ve mundo, aquí hay bielorrusas, rumanas, españolas, nigerianas, ucranianas, chinas, sudanesas y tenemos una de la ciudad de la mierda.

Junqueras - ¿De la mierda?

Rufián – Claro. De Chi... Cago. Chi – Cago. ¿Lo pillas, maromo?

Junqueras – Ja, ja, ja. Muy brillante. (Le dice a Rovira al oído: “Es perfecto. Habla el mismo lenguaje que los catalanocharnegos. Le necesitamos, llegará al corazón de los votantes del área metropolitana”).

Rufián – Secretitos, no. Secretitos para los putitos.

Rovira - ¿Quiere usted ganar cinco mil euros al mes sin tener que trabajar?

Rufián – Ya sabía yo que te ponía. Eres una rica heredera que busca un gigoló guapo que la satisfaga. Ya veía yo que este tipejo no te podía excitar como lo haría yo.

Rovira – No se confunda. Mi interés en usted es un interés nacional. Patriótico. Queremos que sea diputado en el Congreso en las elecciones que se celebrarán el año que viene. Cinco mil euros al mes. Poco trabajo. Muchos billetes de avión y tren gratis. Móvil por cuenta de la empresa.

Rufián - ¿Diputado? Suena bien. Además, me encuentro plenamente capacitado. Soy un experto en gestionar casas de cachondeo.

Junqueras - ¡Bienvenido a la Revolución de las sonrisas!

(Se dan la mano).