Pensamiento

Los votantes se van, los líderes permanecen

23 diciembre, 2015 00:21

Pasaron las elecciones. Pasó la lotería. Disfrute para los premiados. Pero a los partidos políticos les queda una larga travesía. Sobre todo al PP y al PSOE. Presumen de victoria, aunque la procesión va por dentro. ¿Qué victoria? Se han ido los votantes del PSOE (20 escaños menos) y del PP (63 escaños menos). Pero los líderes permanecen. Ni se inmutan.

Ahí tenemos a don Mariano Rajoy, frío y calculador, con intención de formar gobierno. Y ‘obligando’ a Sánchez a que le respalde. Oiga, Mariano, usted es un perdedor. ¿No ve la puerta?

Y ahí tenemos a don Mariano Rajoy, frío y calculador, con intención de formar gobierno. Y ‘obligando’ a Sánchez a que le respalde. Oiga, Mariano, usted es un perdedor. ¿No ve la puerta? Aznar fue a la reunión del Consejo del PP tras cuatro años ausente. No se sabe si fue a colaborar o a enseñarle la puerta a Mariano. Porque ha perdido 63 escaños y va de vencedor. Razones. Bajen del balcón, señores del PP. Con 123 escaños no se puede imponer nada. No se puede ir a ninguna parte. Imponer al adversario unas condiciones es de déspotas o de ignorantes. Tendrá que negociar, ¿no Mariano? Pero se le hace muy duro. Arrasó durante cuatro años. Pues ahora negociará con Cospedal y Soraya, otra cosa no le van a admitir. Bueno, la puerta está abierta, para irse a la calle o... a la oposición.

¿Está buscando el PP sustituto a Rajoy? Puede. Seguro. Unos días de frío con la llegada del invierno y las mentes peperas descubrirán el desastre. Mientras, Rajoy, muy gallego y muy ‘cuco’, presiona al PSOE par que le apoye, sabedor de que no quieren otras elecciones. Podemos se lo comería. Contaría con un millón más de votos de IU y los miles del PSOE desencantados con el grupo de Sánchez. Ahí es donde Rajoy intenta hacer sangrar la herida. Pero pobre PSOE. Si se somete al PP que diga adiós. Será su fin. Lo saben los viejos dirigentes. Imposible el gran pacto. Tendría gracia. Un Pablo Iglesias fundó el partido y otro Pablo Iglesias lo puede fundir. Pero no Rajoy, no. Por ahí no pasa la vieja guardia socialista.

Mucha distancia con el ciudadano. Mucho menosprecio. Mucha actitud soberbia desde la gran mayoría absoluta que no supiste administrar. Pues ahora no pidas benevolencia

Pero en Génova hay decepción. Mucha. Algunos están preparando la maleta, los folios, el ordenador (aunque sea del partido se lo llevan, cosas que guardar) y el billete del AVE. Llegaron las cabezas brillantes como Maíllo y el partido se va por el precipicio. Esta derrota habrá que analizarla en el futuro. Con frialdad. Porque Rajoy no dimite ni a puñetazos, con perdón. Todavía dará largos paseos por esta España nuestra. ¿Adónde nos llevará? Con 123 diputados no se va a ninguna parte, Mariano, convéncete. Abre tu dura cabeza y no te arrastres, no hagas dolorosa tu salida. En términos políticos el PP ha sido el gran derrotado. Los ciudadanos te han dado un patada en el culo para que te vayas por tu falta de sensibilidad. Para que te vayas, Mariano. En pueblos como Pozuelo, tan del PP, ha llegado Podemos y ya es la segunda fuerza. Algo ha pasado, Mariano, que no has hecho bien. Mucha distancia con el ciudadano. Mucho menosprecio. Mucha actitud soberbia desde la gran mayoría absoluta que no supiste administrar. Pues ahora no pidas benevolencia. Nadie había pasado de gobernar en todos los estamentos, (ayuntamientos, autonomías, gobierno central) del Estado a perderlos en una única legislatura. Para meditarlo. Los dirigentes del PP no visteis llegar la realidad. Ciegos. Pronosticabais que Podemos sacaría los mismos resultados que IU, dixit Rajoy, y que Ciudadanos ocuparía el lugar de UPyD. Profeta Rajoy. Han hecho historia. O cuando Arriola dijo que Pablo Iglesias era un ‘friki’. Otro profeta.

Sólo hay una cosa que salva al PP. Sin ellos no se puede hacer ninguna reforma de la Constitución. Son imprescindibles. Su número de diputados es superior a un tercio del Congreso. Con 117 se imposibilita cualquier cambio. Ha esto se puede agarrar el PP.

Se agarran los dirigentes. Aquí, en este país, no dimite ni Dios. Pero algunos no perdáis la puerta de vista. Buscad la puerta con honra antes que os arrojen a la calle. Los votantes ya os han abandonado. Hay cargos que queman. Pero llega Navidad y habrá paz, momentánea. Luego, vendrá enero. Frío enero. Se necesitará una gran estufa para que se acerquen los negociadores a calentarse. Y mucha leña. Para quemar y repartir. Feliz Navidad.