Pensamiento
País de pandereta
Vivimos en un país de pandereta pendiente del titular del día siguiente. No existe estrategia y se habla por boca de ganso. Esta semana hemos tenido múltiples ejemplos que lejos de inspirar confianza en la sociedad la abochornan.
Ejemplo uno. La infanta Cristina y su declaración como imputada. Además de polémicas kafkianas sobre cómo iba vestida, de si bajaba en coche o no, si pasaba por el arco de detección de metales, la perla negra: estaba muy enamorada de su marido, no recuerda nada y depositaba toda su confianza en él. Vamos, que le ha cargado el muerto del desaguisado. Ella pagará, a lo sumo, 600.000 euros. Él, al trullo por una temporadita. ¡Viva el amor!
Ejemplo dos. La ministra Báñez. Se muestra siempre ufana afirmando que se está dejando de destruir empleo. ¡Sólo faltaría! Después de seis años destruyendo ocupación que se mantuviera el ritmo. Por suerte, el ritmo baja, el de la destrucción, pero no levantamos cabeza, en la creación. Para colmo, los salarios están en la picota. En este punto, sale nuestra ministra y nos dice que con salarios bajos no vamos a ninguna parte. Y lo dice ahora, cuando los salarios han caído más de un 10% y está previsto que este año se sume otro tanto. Lo dice la ministra. De las medidas a aplicar para evitarlo, no ha dicho una palabra. Debe estar en la tesis presidencial de no adelantar acontecimientos.
Ejemplo tres. Don José Ignacio Wert nos ha dejado claro que no es dios. Que no puede estar en dos sitios al mismo tiempo. Teníamos nuestras dudas, pero el ministro se ha sincerado y nos ha contado que es mortal. Que se va a Londres para que no le insulten. Piel fina tiene el ministro que confunde la crítica con el insulto. Su ausencia de los Premios Goya o es cobardía, o es irresponsabilidad, o es prepotencia. Cualquiera de ellas vale para definirle como un mal ministro.
Ejemplo cuatro. Clamor por la inmersión, nos titula El Periódico. Así califica la manifestación contra la sentencia del TSJC que obliga a dar en castellano el 25% de las clases. Había algo más de 1000 personas. Dos mil dicen los convocantes. El clamor es más bien patético, como patético es el titular. Insisten los manifestantes que el catalán es atacado y eso que aplicando la sentencia, las clases en este idioma serán el 75% del total. Dicen también que es un ataque a la inmersión. Más bien no. Es simplemente aplicar el sentido común.
Ejemplo cinco. Al conseller Homs le han dado reprimenda en público por abrir la puerta a una segunda vuelta de la consulta. Eso de incomodar a Esquerra está penado en este país. Hasta el president Mas salió a enmendar la plana a su número dos. Para una vez que dice algo sensato le riñen en público. Hará como el rey cuando afirmó "lo siento, no volverá a pasar".
Ejemplo seis. Algunos comentaristas ponen el dedo en la llaga por la crisis que tiene el PSOE por haber decidido que Elena Valenciano encabece la lista socialista a las europeas. Ven estos medios una nueva tormenta en la izquierda española. Lo que pasa en el PP es chirimiri. Mayor Oreja les ha dado portazo. Vidal Quadras se ha ido del partido. No saben a quién poner de candidato y el que sea designado lo será por descarte. La tranquilidad en aguas populares no tiene parangón. En Euskadi andan a palos y en Andalucía sacarán en breve un nuevo cartel electoral "Se busca candidato". Pues mira que la cosa está para poner la paja en ojo ajeno y no ver la viga en el propio.
Ejemplo siete. Tendremos la luz más barata. Ya no estaremos los sufridos españolitos en manos de los mayoristas y las grandes empresas que nos sacan la piel a tiras. Ahora el precio lo fijará el mercado y se tarifará por horas. Los contadores enviarán a las empresas suministradoras nuestros datos para que paguemos por el consumo realizado al precio estipulado. El problema es que estos contadores inteligentes apenas existen. Conclusión, la inteligencia no ha llegado a Industria.
Ejemplo ocho. Xavier García Albiol, el alcalde popular de Badalona, ha decidido ejercer de su propia oposición ante la falta de arrojo y talento de los que tendrían que ejercer este trabajo municipal. Después de dos años de paseo militar en su municipio y de dejar magullados a sus oponentes, ha desempolvado el manual de la autozancadilla. Primero, no cumple su promesa de los libros de texto gratuitos. Alega que no tiene dinero. Un dinero que ha aparecido como por arte de magia para hacer un pabellón deportivo dedicado a la badalonesa, Mireia Belmonte. No sé si es lo más acertado, señor alcalde. No hay dinero para libros pero sí para un pabellón.
Ejemplo nueve. Pere Navarro va a fichar en breve por un canal venezolano. Una nueva telenovela política verá la luz con el primer secretario socialista como protagonista. El guion se irá improvisando on time en función de los acontecimientos que ocurran en el PSC. A estas alturas, el principal partido de la oposición –ERC no cuenta- sigue estando bajo mínimos y enredado en una crisis que no parece que tenga fecha de caducidad.
Ejemplo diez. La que nos va a caer con las balanzas fiscales. Algunos periodistas de alto estanding nacionalista hablan y hablan sobre las balanzas fiscales sin tener más idea que las consignas del España nos roba 16.000 millones al año. Con esto y un bizcocho, Mónica Terribas entrevistó a José Borrell sobre balanzas fiscales. Quedó en evidencia y sufrió un revolcón en su mismo púlpito. La cosa fue tan chunga que se han tirado miles de paladas de silencio sobre la entrevista. Es lo que tiene la libertad en los medios públicos.
¿Y me dirán ustedes que no estamos en un país de pandereta?