Yo tenía 21 años. Corría el año 1977 y la democracia recién nacía. Los estudios de Químicas no me llenaban a pesar de que ya estaba en cuarto de carrera. Decidí dejarlos y pasarme a Periodismo. Para demostrar a mis padres que no se trataba de una chiquillada que podía permitirme, porque vivía a su costa, les dije que me iba de casa a buscarme la vida.
Mi padre, con pose enfadada, me soltó la frase clásica, grandilocuente: "Si sales por esta puerta, no vuelvas más". Cuatro días más tarde volvía, comíamos juntos y la harmonía reinada de nuevo en casa de los Baiges. ¿Pasaría lo mismo si Cataluña se independizase unilateralmente de España? ¿Lloverían amenazas desde el Gobierno español pero al cabo de unos cuantos meses (años) se abrían cerrado todas las heridas?
Firmaría por que si Cataluña sale por la puerta de España, pueda volver a mantener con ella ese mismo bueno rollo. Pero, la verdad, no sé muy bien dónde hay que estampar la firma
Se me hace difícil responder a esta cuestión. Con mi padre lo tenía más claro. Si por mi fuese, estaría a verlas venir. Pero, claro, la cosa es seria. Hay mucha gente que teme porque su pensión zozobre. No es cuestión de tomarse a broma las reflexiones de los empresarios que dicen que el lío no es bueno para los negocios. El cónsul de Estados Unidos manifestó, hace unos días, que no tiene tan claro como el presidente de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España que las empresas de ese país implantadas en Cataluña estuviesen preocupadas por la deriva soberanista, pero dejó caer, como quien no quiere la cosa, que, de momento, las que tenían previsto invertir en territorio catalán se han tomado un compás de espera para ver cómo evoluciono todo.
Quizás nos quedemos sin pensiones o las empresas se vayan o quizás no pase nada de todo esto y, al contrario, el paro se desplome, las personas dependientes reciban las ayudas que ahora se les quita y reabran las plantas de los hospitales cerrados y se construyan otros nuevos. Es casi una profesión de fe.
Yo no volví a vivir a casa de mis padres pero mantuve hasta su muerte muy buen rollo con ellos. Firmaría por que si Cataluña sale por la puerta de España, pueda volver a mantener con ella ese mismo bueno rollo. Pero, la verdad, no sé muy bien dónde hay que estampar la firma.