Una persona fumando en una terraza

Una persona fumando en una terraza Eduardo Parra Europa Press

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El ocio nocturno advierte de que la ley antitabaco generará caos y aglomeraciones en la vía pública

La normativa prohíbe fumar al aire libre y elimina la distinción entre espacios para fumadores (como terrazas abiertas) no fumadores 

Ante esto, la Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (Fecalon) adelanta que la ley obligará a los clientes a fumar en la calle, lo que podría generar molestias a los vecinos, además del gran perjuicio económico para el sector

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El sector del ocio nocturno y la hostelería advierten de que la nueva ley antitabaco, que veta fumar en terrazas y eventos al aire libre, no solo amenaza sus ingresos, sino que también puede provocar desorden y molestias en la vía pública al obligar a los clientes a fumar fuera de los locales.

En un comunicado, la Federación Catalana de Locales de Ocio Nocturno (Fecalon) y otras asociaciones denuncian que la medida tendría consecuencias sociales y económicas "difíciles de asumir".

Más control

Este martes, el Consejo de Ministros aprobó el anteproyecto de la ley antitabaco, que endurece las normas vigentes e introduce por primera vez la prohibición explícita del consumo de tabaco y productos relacionados entre menores.

Hasta ahora, la legislación solo limitaba la venta o entrega de estos productos a menores, sin regular su uso. 

Asimismo, prohíbe fumar y vapear en espacios abiertos, como las terrazas de hostelería, piscinas y marquesinas. 

Sin evidencia

En este escenario, el sector del ocio recuerda que no hay estudios concluyentes que determinen que fumar en espacios abiertos afecte a terceros y que, en la Unión Europea, solo Suecia ha aplicado una medida similar. 

"Destinos turísticos competidores como Italia, Portugal, Croacia, Grecia o Marruecos permiten fumar en terrazas, lo que colocaría a España en clara desventaja", indica. 

Convivencia 

Asimismo, el colectivo alerta de que la normativa generará caos y aglomeraciones en la vía pública, ya que obligará a los clientes a fumar fuera de los locales. 

En ese sentido, desde Fedecal recuerdan que el modelo de convivencia actual "ya permite la cohabitación pacífica de fumadores y no fumadores, sin conflictos relevantes".

Por otro lado, el gremio señala que el anteproyecto traslada a los establecimientos la obligación de ejercer de "policías" frente a sus propios clientes.

Grave situación 

La posible entrada en vigor de esta prohibición se suma a un escenario de incertidumbre para el ocio nocturno y la restauración en Cataluña.

Según el sondeo semestral de Fecalon, más del 85% de los empresarios asegura que su situación económica ha empeorado en 2025, afectada por la disminución del consumo tanto nacional como turístico, el aumento de los costes fiscales y una creciente presión sancionadora.

Competencia desleal

El colectivo también denuncia "competencia desleal", puesto que otros espacios y actividades culturales que "no se someten al mismo nivel de controles y exigencias, así como trabas administrativas que retrasan licencias y ahogan la actividad".

El secretario general de Fecalon, Fernando Martínez, señala que “el sector no necesita más prohibiciones como este anteproyecto, sino también una revisión integral de horarios, fiscalidad y régimen sancionador, que permita operar con seguridad y contribuir al dinamismo cultural, social y turístico de Cataluña". 

Llamamiento

Ante esta situación, el sector pide a los partidos políticos, al Gobierno y a las instituciones autonómicas que se establezca un verdadero espacio de diálogo y consenso.

Insisten en la necesidad de soluciones prácticas, adaptadas a la realidad española, donde la convivencia entre fumadores y no fumadores funciona sin problemas significativos. 

Próximos pasos

Esta reforma, que actualiza la Ley 28/2005 de medidas sanitarias frente al tabaquismo, se enmarca dentro del Plan Integral de Prevención y Control del Tabaquismo 2024-2027, y refuerza la estrategia del Ministerio de Sanidad para reducir el número de fumadores a nivel nacional.

El anteproyecto deberá ahora recibir los informes de los órganos constitucionales antes de regresar al Consejo de Ministros y, posteriormente, ser remitido al Parlamento.